Gran Hermano: el esperado reencuentro de Marcos con su papá que emocionó a todos
Cuando el salteño se reencontró con su padre estalló en llanto y en un profundo abrazo que conmovió a todo el público
La noche del jueves trajo muchas sorpresas para los participantes de Gran Hermano. En primer lugar, los hermanitos recibieron la inesperada visita de los jurados de Masterchef liderados por Wanda Nara. La mediática, que próximamente será la conductora del certamen de cocina, se mostró feliz por volver a ver a algunos de los jugadores que había acompañado a entrar a la casa el primer día del reality.
Luego de ese divertido momento, en el que los cuatro hermanitos tuvieron que preparar una receta de cocina, despidieron a Wanda, Donato De Santis, Damián Betular y Germán Martitegui con la clásica canción que cantan cuando se va alguno de ellos.
De vuelta en el living de la casa, Santiago Del Moro le habló directamente a Marcos. “Hoy te toca a vos, hermano. ¿A quién esperás?”, le preguntó. Y el salteño, muy sereno expresó: “No sé, para mí cualquiera de mi familia que venga me va a encantar, va a ser un súper regalo”.
Entonces el conductor le anunció que en esta oportunidad iba a poder abrazar a alguien que lo quiere y que seguramente él también quiere mucho. “¡Andá corriendo al SUM!”. El participante se dirigió apurado al sector y apenas entró, vio la figura de su padre de espaldas y ya en ese momento, se largó a llorar, mientras se fundían en un largo abrazo.
El abrazo tan extenso resultó conmovedor para todo el público e incluso para los analistas del debate del ciclo. “Es como si hubiera algún tipo de culpas ahí”, reflexionó Laura Ubfal.
En tanto, la cámara seguía con Marcos y con su papá, y si bien estaban llorando y los micrófonos se pegaban con el cuerpo por lo que no se podía escuchar con claridad lo que decían, se pudo oír las palabras de amor entre ellos.
“Te quiero con toda mi alma y con todo mi corazón”, le dijo el papá a Marcos, que estaba profundamente conmovido. De inmediato, quiso recomponerse un poco. “Bueno, charlemos”, agregaron después, pero no pudieron dejar de abrazarse.