Alerta por posible mutación del coronavirus en Argentina
La mutación se llama S_E484K y fue detectada en cinco muestras de pacientes de Buenos Aires por investigadores de nuestro país.
La pandemia del coronavirus, cuyos primeros rastros fueron percibidos en China a finales de 2019, continúa haciendo estragos en el mundo y el volumen de contagios aún no cesa. En las últimas horas, un grupo de científicos argentinos detectaron una mutación del virus en nuestro país.
Se trata de la variación conocida como S_E484K. Esta modificación fue vista en cinco muestras, de las cuales, cuatro fueron de Ciudad de Buenos Aires y la otra de Provincia.
El nuevo rasgo hallado coincide con la versión del virus encontrada en Río de Janeiro. pese a ello, los expertos manifestaron que sería un error afirmar que se trata de la cepa proveniente de Brasil.
Sin embargo, cabe destacar que de entre todos los testeos que se hicieron en pacientes de Argentina aún no fue vista la mutación británica, que forzó al Reino Unido a volver a una cuarentena estricta.
¿Por qué S_E484K?
La mutación se llama S_E484K. La “S” corresponde al gen o proteína S (también conocida como “Spike”), una de las -al menos- 27 que codifica el coronavirus. La “E” y la “K” representan aminoácidos de esa proteína. Asimismo, el número 484 se debe a que es más que una posición.
Los cinco casos con una mutación en la región “spike” del genoma del coronavirus fueron detectados gracias a una “técnica de secuenciación parcial que se implementó en diciembre, más expeditiva y rápida” que se venían haciendo desde marzo, aseguraron desde el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas de Argentina (CONICET).
Secuenciar en forma completa un genoma viral no solo lleva al menos un par de semanas, sino que requiere recolectar una centena de muestras epidemiológicamente valiosas, a fin de optimizar el enorme gasto en dólares que representa esta operatividad, para la cual se requieren reactivos muy costosos.
Tras la proliferación de casos de coronavirus de una nueva variante detectada en Inglaterra, otra de Sudáfrica y una tercera de Brasil, desde el organismo nacional decidieron acotar la tarea que venían realizando y se focalizaron en buscar cambios en ese lugar del genoma: el gen “S”, que funciona como un “marcador” útil para emparentar cambios o mutaciones.