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Así detuvieron a la activista Greta Thunberg en una manifestación en Londres
El hecho sucedió en medio de un evento sobre la industria de petróleo y gas en el mundo.
La activista climática Greta Thunberg fue arrestada afuera de un importante evento de la industria energética en Londres, donde una multitud de manifestantes impidió la entrada al lugar a varios altos ejecutivos petroleros.
Thunberg se había dirigido a los manifestantes que sostenían carteles que decían "Gente, no lucrativa" mientras los delegados intentaban acceder al hotel Intercontinental.
Unos 250 manifestantes bloquearon las entradas al edificio, donde hasta el jueves se celebra el Foro anual de Inteligencia Energética.
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Ejecutivos de empresas como Gunvor Group, Trafigura Group y Shell no han podido entrar para pronunciar los discursos que debían dar a la industria del petróleo y el gas.
La conferencia ha atraído a manifestantes en años anteriores, pero esta es la primera vez que se bloquea el acceso.
El impulso está creciendo entre los manifestantes climáticos antes de las conversaciones globales que tendrán lugar en Dubai dentro de unas semanas.
Después de un verano de incendios forestales y calor extremo, las temperaturas promedio globales de septiembre batieron récords por un margen enorme.
La anomalía de temperatura para el mes fue aproximadamente 1,7°C por encima de los niveles preindustriales, lo que está por encima de la marca simbólica de 1,5°C establecida como objetivo ambicioso en el Acuerdo de París.
Los organizadores de la manifestación aconsejaron a los delegados de la conferencia que no intentaran cruzar la línea de protesta.
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Mientras el grupo causaba estragos fuera del hotel, varios manifestantes accedieron al tejado del edificio.
Se planean más protestas durante los tres días de la conferencia, dijo Greenpeace por correo electrónico.
"Los jefes petroleros están brindando unos por otros en un hotel de lujo y planeando cómo obtener ganancias aún mayores, mientras millones luchan por reconstruir después de un verano de clima extremo", dijo en un comunicado Maja Darlington, activista de Greenpeace Reino Unido.
