Brutal: la policía reprimió a jóvenes que rapeaban en una plaza de San Luis
Un grupo de chicos y chicas menores de edad que se preparaba para una competencia de rap y baile en la Plaza Pringles, una de las más importantes de la ciudad de San Luis, fueron reprimidos y detenidos por más de 30 efectivos de la policía puntana durante la tarde de este domingo.
“Esta tarde mientras estábamos empezando la compe como todos los sábados, la policía de san Luis con un operativo de más de 30 oficiales nos reprimió, nos golpeó, nos arrastró por el piso”, narró uno de los jóvenes afectados desde la cuenta de Instagram @suenaelbajo.
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“PIBXS MENORES DE EDAD, nos tiraron gas pimienta, balas de goma al aire para que nos fuéramos y no nos dejaban ver si nuestros hermanos estaban bien. No es un caso aislado en la provincia, se llevaron a 9 de los nuestros y no nos dijeron ningún tipo de motivo”, continuó.
Según el medio local El Chorrillero todo comenzó en el sector de la plaza ubicado al frente del Colegio Nacional cuando un efectivo de la fuerza de seguridad se acercó para advertirles que “estaban fumando marihuana”. Esto fue luego desmentido por Jazmín, una de las jóvenes reprimidas que aportó su testimonio acerca de lo ocurrido.
“Cuando empezamos a grabar los abusos, nos empezaron a decir que nos iban a llevar por grabar. Se llevaron a uno por estar grabando, en ese momento otro rapero consultó ‘¿por qué se lo llevaban?’ y le empezaron a pegar entre 5 efectivos. También arrastraron a una chica por estar grabando y le quitaron el celular”, denunció.
Luego de golpear a un par de jóvenes, la policía realizó disparos de goma y detuvieron a varias personas, de acuerdo a lo aportado por los y las jóvenes que estaban en el lugar. En total, llevaron detenidas a 6 personas, la mayoría menores de entre 16 y 17 años.
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Según trascendió, los y las detenidas fueron llevadas a la Comisaría Primera del centro de la ciudad. En las afueras, un grupo de jóvenes se manifestó rapeando y haciendo freestyle para repudiar el accionar policial, exigiendo la liberación de los detenidos.
“Fue muy brutal, nos acorralaron y empujaron. A los chicos los agarraron del cuello y le pegaron en el piso, y a las chicas las arrastraron”, concluyó Jazmín, una de las organizadoras de la competencia.
“EL ARTE NO ES DELITO, basta de reprimirnos x querer expresarnos, basta de los prejuicios y de que los medios cambien nuestros relatos”, denunciaron desde el Instagram de la competencia. “QUIEN NOS CUIDA DE LA GORRA? Vos elegís si compartir o ser cómplice. Arriba el arte popular, no nos callamos más”, concluyeron.