Colombia: en la última semana, cada candidato reforzará su mensaje de campaña
Santos es quien lleva la enorme ventaja que le dio la primera vuelta, el 30 de mayo, y la que mostraron las últimas encuestas, por lo que es lógico que refuerce el concepto de un futuro Ejecutivo de unidad, que pareció haberle dado resultado en las últimas semanas.
Mockus, en cambio, apuesta fuerte a que baje el abstencionismo del 51 por ciento que hubo el 30 de mayo, y va a la última semana con dos conceptos publicitarios centrales: "si lo soñamos, lo logramos" y "si convencés a 3 personas, ganás un país mejor".
Las dos ideas buscan, básicamente, penetrar en sectores jóvenes, según los analistas los grandes ausentes de la primera vuelta. Además, se estimaba que buena parte de los respaldos de Mockus estaban en estos grupos, que tan fuerte se habían manifestado en las redes sociales.
Mockus estuvo ayer en Medellín y Cartagena, hoy en Cali y Buenaventura y mañana tendrá su cierre de campaña en Bogotá, pero no con un acto masivo, sino con una actividad "puerta a puerta", en busca de reforzar lo que pretende sea una "alianza ciudadana".
A estas actividades, el ex alcalde de Bogotá sumó un último spot televisivo, en el que otra vez busca alejar la idea de su debilidad, que el oficialismo explotó buena parte de la campaña.
"Algunos en la campaña rival se han inventado que soy débil.
Los débiles son los corruptos, porque no aguantan la tentación", señala Mockus en el aviso, en el que además subraya que no puede "compartir la debilidad de quienes festejan falsas victorias de guerra a costa de la vida de civiles inocentes".
Aunque no lo menciona, resulta clara la referencia a Santos, ex ministro de Defensa que carga con denuncias por casos de "falsos positivos" (campesinos y desocupados asesinados y mostrados como guerrilleros muertos en combate) y por el ataque a un campamento de las FARC en suelo ecuatoriano.
Santos, en tanto, confía en que el "aparato" estatal ("la maquinaria", para los medios bogotanos) vuelva a funcionar como el último domingo de mayo y que su propuesta de Gran Acuerdo Nacional le acerque los votos que le faltan para superar el 50 por ciento.
En verdad, el ex ministro de Alvaro Uribe reposa también en el hecho de que Cambio Radical -tercera fuerza en las elecciones- y el Partido Conservador llamaron a votarlo, y a que lo mismo hizo un grupo importante del Partido Liberal, que, formalmente, dio libertad de acción.
Santos estuvo hoy en Cartagena y mañana estará en Medellín, en el cierre de una semana en la que no encabezó actos masivos, sino pequeñas reuniones con grupos muy específicos.
Su llamado al acuerdo nacional para un futuro gobierno tuvo un apoyo inesperado: el de la Confederación general del Trabajo (CGT), fuertemente opositora a Uribe, respaldo que llegó por las gestiones del escolta de Santos en la fórmula, Angelino Garzón, ex sindicalista y ex ministro de Trabajo.
A tal punto Santos hace base en su iniciativa de acuerdo, que en la noche del jueves le insistió al propio Mockus para que se sume: "Mi gobierno quiere ser incluyente y usted está invitado.
Hagamos lo siguiente: si usted gana y usted cree que yo soy útil para algo, con mucho gusto le ayudo”, lo chicaneó.
A los dos postulantes le quedan, además, dos debates televisivos, el martes y el jueves, que se vuelven clave si se tiene en cuenta que la legislación electoral veta los actos en lugares públicos una semana antes de la compulsa.
A la recta final que significa la última semana, Santos y Mockus llegan con resultados casi calcados de los últimos sondeos: una de Gallup, que otorga 66,5 por ciento para Santos y 27 para Mockus; y otra de Datexco, que les da 65 y 28 por ciento, respectivamente.
En la primera vuelta, Mockus obtuvo un 21,49 por ciento de los votos (3,1 millones), mientras que Santos logró 46,54 por ciento (6,7 millones).
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