Condenaron a dos policías por el abuso de un hombre discapacitado
Un tribunal sentenció a 14 años de prisión a Miguel Ángel Echagüe y Diego Javier Manzotti por la violación de un cuidacoches, ocurrida en una casa de barrio San Lorenzo, un sábado de enero de 2019.
El tribunal pluripersonal que integraron los jueces Sergio Carraro (presidente), Leandro Lazzarini y Octavio Silva condenó a 14 años de cárcel a dos policías por el abuso sexual con acceso carnal agravado por el número de personas, en perjuicio e un hombre de 38 años que cuidaba autos en las afueras de un comercio del barrio San Lorenzo.
El juicio oral, que comenzó el lunes pasado y se desarrolló durante toda la semana, tuvo sentencia este lunes por la mañana, cuando los magistrados leyeron el veredicto que alcanza a Miguel Ángel Echagüe, policía jubilado de 63 años; y Diego Javier Manzotti (42), quien era miembro de la fuerza provincial al momento del hecho.
“Se los condenó a 14 años de prisión a ambos” destacó la fiscal de la Unidad de Violencia de Género, Familiar y Sexual (Gefas), Alejandra Del Río Ayala, quien participó del debate junto al fiscal de Delitos Complejos, Ezequiel Hernández. “Habíamos pedido 17 (años) pero entendemos que la pena surge de la prueba producida, con lo cual en principio, es muy cercana a lo que se pidió. Consideramos que es un caso muy grave, no sólo por el hecho en sí, sino porque se trataba de dos personas, uno que había sido policía y el otro lo fue hasta ese entonces, con el plus de la víctima, que si bien era un hombre mayor de edad, tenía una discapacidad -un retraso moderado-, y que tuvo muchas consecuencias a partir del hecho, como es habitual”, se explayó la fiscal.
Abuso, filmaciones y golpes
El hecho se conoció el 29 de enero de 2019, cuando una mujer allegada a la víctima denunció que su amigo había sido agredido sexualmente y que en esas circunstancias había sido filmado por sus agresores. Aunque no fue precisado, el ataque sexual se produjo en una casa de barrio San Lorenzo, un sábado del mismo mes, cuando ambos acusados invitaron a cenar a la víctima. Además, la fiscalía sostuvo que tras el abuso fue amenazado y golpeado con puños y patadas para que no contara nada.
“Para nosotros fue un caso muy sensible que trabajamos mucho y estamos muy conmovidos por la condena, porque no fue fácil ir contra policías y con estas características”, sostuvo la Dra. Del Río Ayala.
Violencia de género
Asimismo, destacó que “defendimos en los alegatos de clausura que también es un caso de violencia de género. Esto lo mencionamos y explicamos por qué le damos esa dimensión, citando incluso a autores y autoras de estudios de género con lo cual a nuestro entender esto también agrava la situación para los imputados”, reveló.
A propósito del día del abuso, los fiscales reconocieron que “establecer cuándo ocurrió fue muy difícil, porque gran parte de la prueba que se produjo fue bastante tiempo después. Nosotros nos enteramos del caso 15 días más tarde y con el conocimiento previo que tenía la fuerza policial de lo que había pasado”.
Por su parte, el Dr. Hernández explicó que su participación se debió a que “uno de los autores es un policía retirado y el otro es un policía que se encontraba en servicio al momento del hecho, aunque con carpeta médica” y “como está previsto por resolución de la Fiscalía en este tipo de casos nosotros (Unidad Fiscal de Delitos Complejos) colaboramos con la fiscalía de Violencia de Género (Gefas)”.
Además, informó que agresores y víctima “se conocían del barrio”, ya que los primeros “brindaban servicios de custodia informal en un comercio de la zona” donde “la víctima cuidaba coches y solían juntarse por las noches, que fue en definitiva la ocasión en que se produjo el abuso”.