Desesperado pedido de ayuda: perdió el anillo de casado y lo busca por todo Cipolletti
Al hombre le duele más por el “valor sentimental” y apela a la solidaridad.
“Salí a hacer un mango y al final terminé perdiendo la alianza de oro”, lamenta Carlos, quien ahora apela a la solidaridad de la población para recuperar el anillo de casamiento, que más allá de su elevado costo “tiene un valor sentimental muy importante para mí”.
“Para colmo no la tengo grabada porque nunca la llevamos, con lo cuál no está mi nombre ni la fecha del casamiento, que fue hace un año y medio”, explica el vendedor de clavos que deja su teléfono por si alguien encuentra la preciada pieza: 2994287403.
Seguidamente explica en qué circunstancia extravió el caro objeto. “Fui a vender por las ferreterías, recuerdo que me molestaba en un momento, me lo saqué en una de esas cosas que uno hace por inercia y chau…”, cuenta bajoneado.
Carlos llevaba el anillo en la mano izquierda y desde que se percató que le faltaba, comenzó una búsqueda desesperada. “Volví a las ferreterías, a los corralones, anduve por las calles que transité para ver si por una de esas casualidades aparecía… Estuve mandando a las radios, me contacté con ustedes -por LMC- pero hasta ahora no me llamó nadie”, indicó casi resignado.
Se amarga más cuando recuerda que “era un regalo de mi hermana, el regalo de bodas, para mí mujer y para mí”.
No obstante, apela a la solidaridad y no pierde del todo las esperanzas “siempre hay gente buena…”.
Linda historia de amor
Carlos es oriundo de Cipolletti y Belén porteña. “Nos conocimos en La Angostura y se vino conmigo. Le encanta, es mucho más tranquilo que Buenos Aires. Somos felices juntos en la Chacra”, explica el hombre.
Aún no tienen hijos y por lo pronto “nos dedicamos a los sobrinos”.
Ella también está preocupada por lo del anillo, aunque hay momentos que para descomprimir lo “gasta” y chicanea… “Sí, al principio era todo angustia, bronca e impotencia. Después ya me hacía bromas y deliraba con el chiste fácil”.