El mánager de Michael Schumacher acusa a la familia del piloto de mentir sobre su estado
Will Weber, el que fuera representante del alemán durante dos décadas, no entiende no haber recibido noticias del deportista, al que consideraba como un hijo suyo, y que no le hayan dejado ir a verle
Willi Weber, el conocido manager de Michael Schumacher, ha roto su silencio después del accidente de esquí que sufrió el piloto en diciembre de 2013 y por el que estuvo en coma inducido durante seis meses hasta que despertó en junio de 2014.
El representante asegura que ha vivido con inmenso dolor el no haber recibido noticias del deportista por parte de la familia. A raíz que despertara, la familia decidió trasladarle a casa para continuar con el tratamiento y desde entonces apenas se ha sabido nada sobre su estado de salud.
El manager del campeón de la Fórmula 1 expone sus sentimientos en La Gazzetta dello Sport. “Fue un enorme dolor para mí”, asegura. “Intenté cientos de veces contactar a Corinna y ella no respondió. Llamé a Jean Todt para preguntarle si debía ir al hospital y me dijo que esperara, que era demasiado pronto. Llamé al día siguiente y nadie respondió. No esperaba un comportamiento como ese y todavía estoy enfadado por eso”, admite.
“Me mantuvieron fuera, diciéndome que es demasiado pronto, bueno, ahora es demasiado tarde. Han pasado nueve años. Tal vez deberían decir las cosas como son”. Y continúa explicando cómo se siente tras lo ocurrido. “Pude entender la situación inicialmente, ya que siempre hice todo lo que pude para que Michael protegiera su vida privada.
Pero desde entonces solo hemos escuchado mentiras de ellos“, afirma con una gran desazón. “Años después del accidente, me dije a mí mismo que solo cuidara de la familia ya que no podía cambiar las cosas. Era como un hijo para mí. Incluso hoy me duele hablar de eso”, apunta.
Ha pasado casi una década desde que Michael Schumacher sufriera un accidente de esquí y las noticias sobre su estado han sido difundidas con cuentagotas. Sus admiradores no saben cuál es el verdadero estado de salud del piloto alemán, que sufrió una grave caída que le provocó un severo traumatismo craneoencefálico que llevó a estar seis meses en coma.
Cuando despertó fue trasladado a la unidad de rehabilitación de la clínica de Lausana (Suiza), muy cerca de su residencia en Gland, la que abandonaría en 2014 para continuar su tratamiento en casa. Desde aquel momento, el pacto de silencio permanece y sólo ha sido roto en dos ocasiones. Una por su mujer, Corrina, quien señalaba en noviembre de 2019, que el piloto estaba “en las mejores manos posibles” y otra por su antiguo jefe de Ferrari Jean Todt, quien admitía que la comunicación con Michael no era la misma que antes.
En septiembre de 2021 la plataforma Netflix lanzó un documental sobre la vida del piloto, que arroja algo de luz en torno a su estado de salud y que contó con la autorización de sus familia y en el que participan su esposa Corinna y sus dos hijos, Mick y Gina. La esposa del piloto, que no se ha separado de su marido desde aquel fatídico día, señaló que, si las cosas hubieran sido de otro manera Michael no debería haber estado en las montañas, y mucho menos en una pista de esquí el día de la tragedia.
“Poco antes del accidente en Méribel, me dijo: ‘La nieve no es ideal. Podríamos ir a Dubai a hacer paracaidismo”, revela Corinna en este documental. El destino quiso que el matrimonio nunca cambiara sus planes y que se decantaran por los Alpes franceses para pasar esas navidades. “Nunca culpé a Dios por lo sucedió. Fue simplemente mala suerte, como le puede pasar a cualquiera”, asegura, lejos de lamentarse. Su mujer alaba el comportamiento de su marido día a día: “Cuando le conocí sentí que es una persona especial. Creo que es muy fuerte mentalmente. Extremadamente fuerte. Me muestra todos los días lo fuerte que es”.