Poco habitual
El papa Francisco destituyó a un obispo conservador estadounidense
Se trata de Joseph Strickland, quien había publicado en redes sociales su rechazo al "programa que socava el Depósito de la Fe" del Papa.
En un sorprendente movimiento, el papa Francisco ha destituido al obispo Joseph E. Strickland de Tyler, Texas, conocido por ser uno de los críticos más fervientes entre los conservadores católicos estadounidenses. La medida, inusual en la Iglesia Católica, se produce sin la tradicional solicitud de renuncia y resalta tensiones en torno a divergencias doctrinales y una reciente investigación sobre la administración diocesana.
El papa Francisco ha tomado una medida extraordinaria al destituir al obispo Joseph E. Strickland de Tyler, Texas, uno de los críticos más contundentes entre los conservadores católicos en Estados Unidos, según un comunicado emitido por el Vaticano el sábado.
Esta decisión es particularmente inusual en la Iglesia Católica, ya que normalmente a los obispos con desacuerdos significativos se les pide que presenten su renuncia antes de ser relevados de sus funciones, renuncia que el Papa generalmente acepta.
El obispo Strickland, de 65 años, 10 antes de la edad habitual de jubilación episcopal, ha sido una figura destacada en la diócesis de Tyler desde que asumió el cargo en 2012. Su destitución se produce después de expresar públicamente su rechazo al "programa que socava el Depósito de la Fe" del Papa, a través de mensajes en sus redes sociales.
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La decisión de destituir a Strickland se enmarca en una investigación del Vaticano este año sobre la administración de la diócesis de Tyler, que incluyó una revisión de sus asuntos financieros, según informes de medios católicos. La destitución fue anunciada simultáneamente por el Vaticano y la Conferencia Episcopal de Estados Unidos, sin proporcionar una razón específica.
En respuesta a la destitución, el papa Francisco ha nombrado al obispo Joe Vasquez de Austin, Texas, como administrador interino de la diócesis de Tyler. La reacción de Strickland aún no se ha hecho pública.
Esta medida del Papa subraya las tensiones dentro de la Iglesia Católica en relación con diferencias doctrinales y plantea preguntas sobre el manejo interno de la administración diocesana. La destitución de Strickland es un acontecimiento inusual que captará la atención de la comunidad católica en todo el mundo.
