En Filipinas
El "Spiderman" francés escaló un rascacielos de 217 metros y terminó preso
A sus 61 años, Robert demostró una vez más su destreza y valentía al escalar la fachada del edificio.
La hazaña de Alain Robert en Filipinas ha vuelto a impresionar al mundo. El renombrado escalador francés, conocido como el Hombre Araña, desafió las alturas al ascender sin arnés el imponente edificio G.T. International Tower en Manila, Filipinas, un rascacielos de 217 metros de altura que es el décimo más alto del país asiático.
A sus 61 años, Robert demostró una vez más su destreza y valentía al escalar la fachada del edificio, atrayendo a multitudes y dejando a todos boquiabiertos con su increíble proeza. Conocido por realizar ascensos en solo libre, utilizando únicamente sus manos y pies sin ayuda de ningún otro dispositivo, el escalador francés ha conquistado numerosos edificios emblemáticos alrededor del mundo a lo largo de su carrera.
Tras completar su ascenso, Alain Robert fue arrestado por la Policía local, una situación a la que está acostumbrado según sus propias palabras. En declaraciones a la prensa, el intrépido escalador mencionó que ha sido arrestado unas 150 o 160 veces en diferentes países, y que estas situaciones suelen resultar en multas y amonestaciones menores.
Robert, quien visitó Filipinas por primera vez en 1997 y ha escalado en el país varias veces desde entonces, expresó su aprecio por la cultura y la hospitalidad filipina, describiendo a sus habitantes como personas alegres y afables. Para él, la escalada en el G.T. International Tower fue simplemente una "pequeña escalada" en comparación con sus logros anteriores.
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La fama de Alain Robert se consolidó en 2011 cuando conquistó el Burj Khalifa de Dubái, el edificio más alto del mundo en ese momento. A lo largo de su carrera, ha escalado algunos de los monumentos y edificios más famosos del mundo, incluyendo la Torre Eiffel, la torre Taipei 101, el Puente Golden Gate, el edificio del Empire State, la Torre Sears, la Ópera de Sídney y la Torre Agbar de Barcelona, entre otros.
Su pasión por desafiar las alturas y su habilidad única lo han convertido en una leyenda viva de la escalada urbana, inspirando a muchos con sus impresionantes hazañas y su espíritu indomable.