Encuentran en un laboratorio de Pensilvania frascos de viruela sin homologar
Se encontraron varios viales con la etiqueta “viruela” en una instalación de investigación de vacunas en Pensilvania, dijeron este martes los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC, por sus siglas en inglés).
“No hay indicios de que nadie haya estado expuesto al pequeño número de viales congelados”, dijeron los CDC en un comunicado enviado por correo electrónico a CNN.
La provincia adhirió a la conmemoración del último caso de viruela
“Los viales congelados etiquetados como ‘Viruela’ fueron descubiertos incidentalmente por un trabajador de laboratorio mientras limpiaba un congelador en una instalación que lleva a cabo la investigación de vacunas en Pensilvania. Los CDC, sus socios de la Administración y las fuerzas del orden están investigando el asunto y el contenido de los viales parece estar intacto”, añadieron los CDC.
“El trabajador del laboratorio que descubrió los viales estaba usando guantes y una mascarilla. Proporcionaremos más detalles a medida que estén disponibles”.
La viruela fue declarada erradicada en 1980 por la Organización Mundial de la Salud tras un esfuerzo concertado de vacunación mundial.
Antes de eso, el virus, que se transmite fácilmente de persona a persona, infectaba a 15 millones de personas al año y mataba a cerca del 30% de ellas. El último brote conocido en Estados Unidos fue en 1947.
En 2014, los empleados de los Institutos Nacionales de la Salud (NIH, por sus siglas en inglés) encontraron seis viales de viruela en un almacén no utilizado mientras empacaban cosas para la mudanza de un laboratorio en el campus de los NIH en Bethesda, Maryland para trasladarlo. Dos de los viales contenían virus viables. Los CDC dijeron en ese momento que no había pruebas de que nadie hubiera estado expuesto al contenido de ninguno de los viales.
Los gobiernos han discutido sobre la conveniencia de conservar muestras del virus o de destruir todas las copias conocidas. La mayor parte de la vacunación rutinaria se detuvo en 1972, pero el personal militar y algunos investigadores siguen siendo vacunados. Los CDC recomiendan que las personas que necesitan protección a largo plazo reciban refuerzos contra la viruela cada 3-5 años, aunque al menos un estudio indica que las personas vacunadas pueden tener al menos cierta inmunidad de por vida.