Europa enfrentará el verano más caluroso de toda su historia

Con la llegada del verano, Europa se enfrenta a la perspectiva de experimentar las temperaturas más altas jamás registradas en su historia. Pronósticos climáticos alarmantes advierten que 2024 podría superar a 2023 como el año más cálido registrado hasta ahora, con temperaturas extremas que ya comienzan a sentirse.

Los datos de Copernicus, el servicio de vigilancia climática de la Unión Europea, revelan que abril de 2024 fue el mes más caluroso jamás registrado, marcando el undécimo mes consecutivo de temperaturas globales récord. Este aumento, que supera en 1,58ºC la media de la era preindustrial y en 0,67ºC la media entre 1991 y 2020, evidencia el impacto del calentamiento global en todo el mundo.

En Asia, por ejemplo, millones de personas han enfrentado temperaturas casi letales, mientras que el blanqueamiento masivo de corales ha devastado los ecosistemas marinos. En Europa, se prevé que el continente enfrente un verano abrasador, con temperaturas nunca antes registradas.

El fenómeno de El Niño, aunque debilitado, sigue contribuyendo al calentamiento global, agravado por las crecientes concentraciones de gases de efecto invernadero. Los científicos, preocupados por las consecuencias devastadoras del calentamiento global, buscan comprender si las altas temperaturas son un fenómeno temporal o una señal de un cambio climático más rápido de lo previsto.

Ante esta perspectiva, organizaciones ambientales hacen un llamado urgente a la acción, instando a los gobiernos y a la población a tomar medidas para reducir los agentes contaminantes y prepararse para un verano sin precedentes. Recomendaciones como almacenar agua potable y reducir desperdicios, así como crear planes de contingencia, son clave para enfrentar el verano más caliente de Europa.