Expertos hacen hincapié en el peligro de los espacios cerrados
En lugares cerrados, casi sin excepción, es donde se produce la transmisión del coronavirus, insistieron a fines de abril investigaciones que dirigieron su inquietud a la máxima instancia de poder en Alemania.
“Las transmisiones en el exterior son extremadamente raras”, explicaron los científicos, quienes recordaron que “nunca” dan lugar a infecciones grupales, como sí ocurren en lugares cerrados como residencias de ancianos y escuelas.
Ellos aseguran que estos conocimientos científicos sobre el potencial de infección no se han reflejado de manera adecuada en el debate público, por lo que muchas personas tienen “ideas erróneas sobre el potencial de contagio”, pues creen que “afuera es peligroso”.
“Nosotros criticamos especialmente las medidas que pretenden sugerir que podría ser peligroso estar al aire libre”, le dijo Christof Asbach al canal de televisión France 24 desde la ciudad alemana de Duisburgo.
“Esto incluye en particular, por ejemplo, la obligación de llevar tapabocas al aire libre”, añade Asbach, quien es uno de los firmantes de la carta y además el presidente de la Sociedad para la Investigación de Aerosoles, una organización fundada en 1972.
Según explica, las investigaciones han demostrado que las corrientes de viento al aire libre diluyen la concentración de los virus, mientras en interiores esta aumenta continuamente. De ahí que el peligro afuera sea mucho menor.
Sin embargo, advirtió: “Si a las personas se les dice que “todas las formas de contacto interpersonal son peligrosas, reforzaremos la fatiga pandémica que se manifiesta en todas partes”.
De ahí que Asbach explique que es “extremadamente importante comunicar siempre con claridad” dónde están los riesgos y que esta comunicación se refleje también en las medidas que tomen las autoridades.
En una misiva que dirigieron recientemente a la canciller Ángela Merkel, los expertos recomendaron varias medidas concretas que pueden ayudar a reducir las infecciones en lugares cerrados.
“El punto más importante es evitar los contactos. Evitar los contactos significa mantener el número de contactos lo más bajo posible, pero también que el tiempo que pase con otras personas en lugares cerrados sea lo más corto posible”, explicó.
Asbach añade que en momentos en que no sea posible evitar contactos en interiores, es importante usar tapabocas y ventilar.
“Y una buena ventilación se consigue abriendo totalmente las ventanas, a ser posible en varias habitaciones paralelas al mismo tiempo, porque así me aseguro de que haya un intercambio de aire muy eficiente”, dice.
Asbach y sus colegas también explican que es importante conseguir purificadores de aire, especialmente en sitios donde las personas pasan mucho tiempo, como colegios, oficinas u otros lugares de trabajo.