Falleció con COVID-19 y el cuerpo se “perdió” durante una semana
Un insólito y lamentable hecho ocurrió en la ciudad de Venado Tuerto, en medio de la compleja situación que vive esa localidad del departamento General López por la pandemia de coronavirus.
Allí, familiares de un adulto mayor denunciaron públicamente que luego de constatarse el fallecimiento de la persona con COVID-19, el cuerpo literalmente “desapareció” y fue encontrado una semana después.
El triste episodio derivó nuevamente en la clausura de una sala velatorio ubicada en la intersección de calles Falucho y Alberdi, que en junio pasado, también había sido denunciada por irregularidades: allí se había encontrado una suerte de “acopio” de cadáveres en un galpón, algo totalmente fuera de protocolo por la pandemia de coronavirus.
Lo cierto es que ahora, familiares del octogenario emprendieron una cruzada para dar con el féretro y el cuerpo de la persona, que se encontraba perdido en la ciudad desde hace una semana. Desde la secretaría de Control Urbano del Gobierno local, se sumaron a la búsqueda hasta hallarlo en el depósito de la funeraria. Ahora, el Tribunal de Faltas clausuró el lugar y emitió sanciones.
El hombre, había fallecido en un sanatorio privado y desde entonces, no había noticias de su cuerpo. Había fallecido luego de sufrir un accidente doméstico, aunque a posteriori se notificó que era positivo de Covid-19, debiendo activarse el protocolo sanitario.
En todo este derrotero, los familiares desconocían la ubicación del cuerpo del difunto, lo que ameritó una investigación. Mediante esa búsqueda, se intervino este martes la sala de sepelios de la empresa Servicios General López, que debía hacerse cargo del servicio de cremación, una de las dos alternativas -junto al entierro- de los cuerpos en tiempos de pandemia.
Así, con la presencia de los inspectores municipales y de familiares del difunto, se constató que el féretro con el cuerpo buscado se hallaba en el mismo galpón ubicado a 80 metros de la sala velatoria, junto a otro cuerpo; un ámbito no habilitado para funcionar como depósito de cadáveres pre-cremaciones y que nuevamente fue clausurado.
“Después de una charla con el encargado de la funeraria, en presencia de la jueza (de Faltas), nos reconoció que el cuerpo estaba allí pero en una sala cercana, sin respetar ningún tipo de protocolo. Cuando abrimos el galpón indicado, encontramos dos cuerpos, uno de los cuales era el de este hombre”, explicó la secretaria de Control Urbano, Silvia Rocha.
Visiblemente ofuscada por esta reincidencia, la funcionaria aseveró que “estuvieron ocultando el cuerpo aun cuando era de público conocimiento su búsqueda, que pudo tener resultado positivo con nuestra intervención, para tranquilidad de la familia”.
Actuación del Tribunal de Faltas
La jueza de Faltas, Janina Ferreyra, detalló que durante el procedimiento se labraron las actas de infracción correspondiente, y se constató la violación de la clausura del depósito ubicado en Juan B. Alberdi al 200, espacio no habilitado para el almacenamiento de cuerpos. Paralelamente se estableció que no se cumplieron los protocolos para Covid-19, en el caso de uno de los dos fallecidos hallados en el lugar.
Ferreyra explicó que “volvimos a colocar las fajas de clausura, se constató la violación de la clausura preventiva anterior, se labró acta de infracción por violación al protocolo de COVID y se citó a audiencia a la parte infractora para que se presente en el Tribunal de Faltas donde continuará todo el procedimiento”, que será puesto en conocimiento del Ministerio Público de la Acusación (MPA).
En el caso de las personas fallecidas halladas en el depósito se hicieron los traslados para darles los destinos finales que los familiares tenían previstos: uno fue al Cementerio y el otro a cremación en la ciudad de Colón, provincia de Buenos Aires.