Santiago del Estero
Fue a rescatar a su madre, y lo mataron de un puñala en el corazón
Mauricio Díaz murió, pese al esfuerzo de los médicos por salvarlo.
Un brutal episodio de violencia sacudió este fin de semana el barrio Reconquista de Santiago del Estero, cuando un joven de 18 años fue asesinado por la pareja de su madre mientras intentaba liberarla tras varios días de cautiverio. El agresor, identificado como Fernando Matías Cruz, de 33 años, fue detenido y enfrenta cargos por homicidio y violencia de género.
Todo comenzó cuando María Elizabeth Díaz, la madre del joven, fue golpeada y encerrada en una vivienda por Cruz, quien la mantenía incomunicada junto a su hija de 5 años. Sin noticias de su madre, Mauricio Díaz, el hijo mayor de la mujer, inició una desesperada búsqueda que culminó en tragedia. Al encontrarla en la madrugada del sábado, Mauricio confrontó al agresor, desatándose una violenta pelea que terminó con el joven apuñalado en dos ocasiones.
Mauricio logró salir de la casa y caminar una cuadra antes de colapsar debido a las heridas. Vecinos alertaron a la Policía, y el joven fue trasladado de urgencia al Hospital Regional, donde fue operado. Sin embargo, a pesar de los esfuerzos médicos, murió horas después a causa de un paro cardiorrespiratorio provocado por las heridas, que afectaron de lleno su corazón.
El ataque se produjo en un contexto de violencia de género que la madre del joven había sufrido durante más de un año, según denunció tras el crimen. María Elizabeth Díaz reveló que no había dado aviso a la Policía antes por las constantes amenazas de Cruz, quien la mantenía bajo control con la promesa de dañar a sus hijos.
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La fiscal Fernanda Vittar encabeza la investigación, que está en marcha para esclarecer todos los detalles del caso. La División Homicidios y Delitos Complejos trabajó en la escena del crimen, mientras que Cruz permanece detenido y bajo custodia policial en el hospital, recuperándose de las lesiones que sufrió cuando familiares del joven intentaron lincharlo.
Este trágico hecho expone una vez más la realidad de la violencia doméstica y el devastador costo que puede tener para las familias involucradas.
