Tras casi dos meses
Jujuy: liberaron a los dos hombres que estaban presos por tratar de “cornudo” a Gerardo Morales
El ex gobernador había mandado a apresar a dos hombres que tuitearon sobre la presunta infidelidad de su esposa, Tulia Snopek, con un cantante de Los Tekis.
Este lunes, la Justicia de Jujuy ordenó liberar a los dos hombres que estaban presos hace 50 días por tuitear sobre la presunta infidelidad de Tulia Snopek, la esposa del exgobernador del cornudo Gerardo Morales.
El juez Gustavo Ortiz aceptó el pedido del fiscal Walter Rondón y ordenó la excarcelación. Aunque advirtió que seguirán sometidos a proceso de investigación y que el juicio oral se realizará en la última semana de marzo.
Si bien la orden de liberar a los dos acusados, Nahuel Morandini y Roque Villegas, existe desde el día 1, la Justicia decidió mantenerlos detenidos 50 días debido a las denuncias de Snopek y Morales que, tras algunos exámenes psicológicos, aseguraron tener daños irreparables, al igual que su hija de 2 años.
"Se perturbó el estado civil de una persona totalmente inocente, generándole un daño que es prácticamente imposible resarcir", había dicho el fiscal Hugo Walter Rondón en alusión a la menor.
Incluso, los medios jujeños habían deslizado que Morales quería avanzar sobre este eje y pedir una condena de 2 a 6 años de prisión contra los acusados por "violar el artículo 139 del Código Penal que dice que 'se impondrá prisión de 2 a 6 años al que (…) por un acto cualquiera, hiciere incierto, alterare o suprimiere la identidad de un menor de 10 años, y el que lo retuviere u ocultare'".
A estos dos se le sumó la arquitecta Lucía González, quien fue la autora del audio viral que fue compartido vía WhatsApp.
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Ahora, la situación judicial parece haber dado un giro de 180°, el fiscal que hace unos días pedía que sigan detenidos, indicó que no hay "riesgo procesal" que justifique mantenerlos en prisión porque ya presentó su requerimiento de elevación a juicio y las pruebas ya están reunidas.
Sin embargo, hay una cláusula de libertad para los acusados: se les pidió, como "regla de conducta", no hablar de lo que sucedió. Por lo tanto, no podrán hablar en redes sobre sus días en prisión ni sobre la familia Morales.
