Mutación
KP.2: la última variante de COVID-19 en EE.UU. llegaría a Argentina
Una de las razones principales por las cuales una nueva variante puede sustituir a las anteriores es su capacidad de propagación.
Una nueva cepa del coronavirus, conocida como KP.2, ha emergido como la variante predominante en Estados Unidos, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC). Esta variante, que forma parte del grupo de variantes FliRT —nombradas así por sus mutaciones características— pertenece a la familia ómicron del coronavirus.
La variante KP.2 está desplazando a la variante JN.1 y sus subvariantes, que hasta ahora habían sido las más prevalentes en EE.UU. A medida que la variante KP.2 gana terreno, se espera que también llegue a Argentina en un futuro cercano.
La doctora Leana Wen, experta en salud pública, ofrece una perspectiva sobre las variantes de COVID-19. "Desde el comienzo de la pandemia, hemos estado observando la evolución de nuevas variantes del virus. La variante original del coronavirus fue reemplazada por Alfa, seguida por Beta, luego Delta y, más recientemente, Ómicron," explica Wen.
KP.2 se encuentra dentro del linaje ómicron y está mostrando una capacidad significativa para superar a variantes anteriores como JN.1. La llegada de nuevas variantes siempre plantea tres preguntas fundamentales: ¿Es más contagiosa? ¿Provoca una enfermedad más grave? ¿Las vacunas y tratamientos actuales siguen siendo efectivos?
Una de las razones principales por las cuales una nueva variante puede sustituir a las anteriores es su capacidad de propagación. “KP.2 parece ser tan contagiosa o incluso más que las variantes anteriores,” señala Wen, “lo que significa que podría expandirse con facilidad, como hemos observado con el coronavirus a lo largo de la pandemia.”
Puede interesarte
Sin embargo, hay buenas noticias. “KP.2 no parece ser más peligrosa en términos de gravedad de enfermedad. De hecho, las hospitalizaciones relacionadas con el COVID-19 se encuentran en niveles mínimos históricos,” asegura Wen. “Y no hay indicios de que las vacunas actuales o los tratamientos disponibles dejen de ser efectivos contra esta nueva variante.”
Wen explica que la mayoría de las personas infectadas con el coronavirus no suelen saber qué variante específica está causando sus síntomas. Los síntomas del COVID-19, como secreción nasal, dolor de garganta, dolor de cabeza, fiebre, tos y dolores corporales, son comunes a todas las variantes. “No hay síntomas particulares que distingan a KP.2 de otras variantes del coronavirus,” aclara Wen. “Las pruebas de antígenos rápidas siguen siendo una herramienta útil para detectar COVID-19, aunque las pruebas de PCR siguen siendo más precisas y confiables.”
En relación con la eficacia de las vacunas, Wen asegura: “Las vacunas existentes deberían seguir funcionando contra KP.2. Los CDC han recomendado una segunda dosis de refuerzo de la vacuna que se lanzó en otoño de 2023 para mayores de 65 años.” Además, se anticipa que en el otoño se lanzará una nueva versión de la vacuna contra el COVID-19, formulada para enfrentar las variantes que se espera estén en circulación en otoño e invierno. “Si KP.2 sigue siendo una variante relevante, las vacunas de otoño estarán diseñadas para ser aún más efectivas contra ella,” dice Wen.
Puede interesarte
“A principios de este año, los CDC eliminaron el requisito de aislamiento de cinco días. Ahora, se recomienda que las personas con diagnóstico positivo de COVID-19 se queden en casa hasta que no tengan fiebre durante al menos 24 horas y sus síntomas mejoren. Durante los siguientes cinco días, deben seguir tomando precauciones, como usar mascarillas y limitar el contacto cercano con otras personas,” explica Wen.
Para aquellos en riesgo de desarrollar una forma grave de la enfermedad, Wen sugiere considerar tratamientos antivirales. “Las personas mayores, los inmunocomprometidos y quienes padecen afecciones médicas graves deberían consultar a su médico para ver si deben recibir un tratamiento antiviral. Existen dos medicamentos orales y una inyección antiviral disponibles,” recomienda Wen, quien es médica de urgencias y profesora clínica asociada en la Universidad George Washington.