La combinación de Sputnik V y AstraZeneca se probará en Azerbaiyán
Está previsto que esas pruebas en la exrepública soviética permitan “evaluar la inmunogenicidad y la seguridad del uso de la combinación” de las dos vacunas, detalló el comunicado de el Fondo Ruso de Inversión Directa.
El Fondo Ruso de Inversión Directa (RDIF) informó este martes que las autoridades azerbaiyanas dieron luz verde al inicio durante este mes de febrero y en su territorio de ensayos clínicos con la combinación de las vacuna contra el coronavirus Sputnik V y la de la farmacéutica británica AstraZeneca.
“El RDIF anuncia la autorización del Ministerio de Salud de Azerbaiyán para llevar a cabo unos ensayos clínicos del uso de la combinación de la vacuna Sputnik V y la vacuna desarrollada por la compañía AstraZeneca en colaboración con la Universidad de Oxford. Los ensayos clínicos empezarán antes del final de febrero”, sostiene el comunicado.
Está previsto que esas pruebas en la exrepública soviética permitan “evaluar la inmunogenicidad y la seguridad del uso de la combinación” de las dos vacunas.
La vacuna de Oxford-Astrazeneca reduce la propagación del coronavirus en un 67%
“El programa de ensayos se implementará durante seis meses en el territorio de varios países. Se prevé implicar a 100 voluntarios para cada una de las pruebas del programa”, agregó el comunicado reproducido por la agencia de noticias Sputnik.
El 21 de diciembre pasado el Centro de Epidemiología y Microbiología Nikolai Gamaleya, productor de Sputnik V, y AstraZeneca firmaron un memorando de cooperación que supone desarrollar e implementar un programa de ensayos clínicos encaminados a evaluar el uso de uno de los componentes de la vacuna rusa y uno de la vacuna de AstraZeneca.
El objetivo de combinar los componentes de las dos vacunas es ver si de ese modo se incrementa la respuesta inmunitaria y mejora la protección frente al SARS-CoV-2.
Oxford comenzó a estudiar la combinación de dos vacunas contra el coronavirus
La vacuna AZD1222, desarrollada por AstraZeneca en cooperación con la Universidad de Oxford, y la vacuna rusa Sputnik V se basan en vectores adenovirales, en los que está incrustada la proteína del virus SARS-CoV-2.
Los adenovirus no son capaces de replicarse, son un sistema para entregar antígenos a las células del cuerpo humano.