La Policía sueca otorgó el derecho de quemar una copia del Corán a un activista antiislámico
Un activista de extrema derecha de Dinamarca recibió permiso de la policía Sueca para organizar una protesta frente a la Embajada de Turquía en Estocolmo, y quemar el Corán, libro sagrado del Islam.
La Policía sueca otorgó al activista de extrema derecha Rasmus Paludan el permiso para realizar esta acción, que coincidirá con otras manifestaciones autorizadas de grupos prokurdos y proturcos.
Video: “Soy musulmán, ¿tenés alguna pregunta?”, un experimento social en la peatonal santafesina
La semana pasada, Estambul se indignó por un acto que llevó adelante el Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) en Estocolmo, en la que ahorcaron un muñeco caracterizado como Recep Tayyip Erdogan.
En respuesta, Turquía sostuvo que tales manifestaciones posponían la ratificación de la adhesión de Suecia a la OTAN.
Ahora, un activista de extrema derecha danés recibió el permiso de la Policía para organizar una protesta ante la Embajada turca en la capital sueca el 21 de enero, en la que pretende quemar una copia del Corán. Esta manifestación coincide con otras dos de grupos proturcos y prokurdos planeadas para el mismo día en esa ciudad.
El activista, de 41 años, se llama Rasmus Paludan y es el líder del partido danés de extrema derecha Línea Dura (Stram Kurs), conocido por protagonizar eventos similares tanto en Dinamarca, como en Suecia.
Por su parte, el ministro de Relaciones Exteriores de Suecia, Tobias Billström, expresó que sería “extremadamente impropio” de su parte solicitar que no se le permitiera a Rasmus Paludan quemar el Corán frente a la Embajada turca en Estocolmo.
Además, manifestó su preocupación por que esta protesta pudiera retrasar aún más la ratificación turca de la candidatura sueca para entrar en la OTAN.
“Todo lo que retrase el proceso innecesariamente es, naturalmente, algo que nos tomamos con la mayor seriedad”, dijo.
Paludan afirmó que va a manifestarse “a favor de la libertad de expresión contra Turquía”.
En este contexto, la Cancillería de Turquía convocó este viernes al embajador de Suecia en Ankara. El Ministerio de Asuntos Exteriores condenó enérgicamente la protesta, calificándola de “provocadora”, y espera que se revoque el permiso para la manifestación.
Asimismo, Turquía canceló este sábado la visita del ministro de Defensa sueco Pal Jonson, prevista para el 27 de enero. Medios locales detallan que el ministro de Defensa turco Hulusi Akar calificó la visita de “inútil”.