La Selección apunta a volver a ser sólidos en defensa

De todos modos, en el seleccionado argentino hay tranquilidad porque los problemas defensivos fueron más por errores individuales, que por desajustes tácticos.

Algunos “pifies” de Martín Demichelis, los problemas que tuvo ante Nigeria Jonás Gutiérrez y alguna falta de coordinación general fueron los únicos errores de un equipo que en lo va del Mundial tuvo un rendimiento parejo y aceitado.

Maradona logró en estos dos partidos poner en cancha un equipo sumamente ofensivo, con tres puntas y volantes con llegada pero eso no descompensó y se logró un equilibrio interesante.

En 180 minutos de juego, contra rivales que se pararon a jugar de contra, el equipo argentino prácticamente nunca fue encontrado mal parado.

Los defensores argentinos pocas veces quedaron mano a manos contra sus rivales de turno y jamás fueron superados numéricamente.

Sin embargo, pese a ese equilibrio logrado, hubo desajustes individuales, que llevaron a los centrales, Martín Demichelis y Walter Samuel, a no coordinar bien en varias jugadas y eso los llevó a cometer errores.

En el partido ante los surcoreanos Maradona corrigió el problema por el sector derecho de Jonás Gutiérrez colocándole ahí a un volante clásico, como Maximiliano Rodríguez, y ya los centrales no tuvieron que cruzar tanto a las espaldas del “4”.

De todos modos, la buena dupla que parecían formar Demichelis-Samuel todavía no pudo consolidarse por varias cuestiones, una clave, es que necesitan más partidos juntos.

Por eso, si Samuel está en condiciones, será titular ante los griegos, de lo contrario ingresará Nicolás Burdisso.

En el cuerpo técnico argentino saben que con Javier Mascherano tienen un jugador tácticamente implacable, que sabe perfectamente como relevar, pero quieren volver a sentirse sólidos.

Muchos creen que el seleccionado argentino cuando enfrente a rivales de mayor envergadura puede llegar a cambiar el esquema, pero ayer Mascherano fue claro en una explicación que no muchos prestaron atención.

“Si nosotros dejamos tres hombres adelante, el rival tiene que dejar por lo menos cuatro y eso también provoca que nos ataquen con menos gente”, señaló el capitán del seleccionado argentino.

“Nosotros, los volantes y los defensores, debemos estar muy concentrados porque es lógico que cuando un equipo va para delante en algún contra te puedan agarrar mal parado, pero eso prácticamente no sucedió”, agregó Mascherano.

Muchas de las cuestiones que debe mejorar el seleccionado argentino se irán corrigiendo con los entrenamientos y los partidos, pero, como dicen jugadores y cuerpo técnico en Pretoria, van por el buen camino y ganando siempre es más fácil corregir errores.