“Me pusieron huesito de gente muerta”, la reveladora frase de Vero Lozano
Vero Lozano volvió a Cortá por Lozano, su programa en Telefe, y contó detalles sobre su operación de pies tras su accidente en Aspen.
Verónica Lozano volvió a Telefe después de haber sido operada del pie por el accidente que sufrió en Aspen, Estados Unidos, mientras estaba esquiando. Fue una operación bastante compleja, por lo que necesitó varios días de recuperación en su casa y sin poder trabajar. Ahora, regresó a Cortá por Lozano y contó detalladamente cómo fue el procedimiento quirúrgico. Además, destacó un detalle que generó algo de impresión entre sus seguidores: le pusieron “huesito de gente muerta”.
Tras haberse caído de una aerosilla a una distancia de 10 metros al nivel del piso, Vero contó que sus dos pies le habían quedado tan aplastados “como una papa” y que el médico que la operó de urgencias intervino en sus dos pies a la vez. “Tiene que meter clavos para reconstruir porque el pie me quedó como una papa que se aplastó. Sé de la gravedad de la situación, pero confío”, había adelantado antes de la operación.
Ahora que ya regresó a su casa y a su trabajo de todos los días, Lozano contó cómo es su día a día mientras se recupera. “Me hicieron una incisión de cada lado del pie. Eso se abrió y ahí me pusieron tornillo, huesito de gente muerta, plaquita… Este piecito duró tres horas la operación, y el otro dos horas. Tenía los talones detonados”, comenzó.
Video: Vero Lozano regresó a la televisión tras su terrible accidente
“Lo tomo con humor porque es mi estilo, pero la verdad es que es muy complicado lo que me pasó. Ahora el cuerpo está en proceso de recuperación para que se adapte a eso nuevo y se vuelvan a reconstituir los tejidos y los huesos. Eran diez semanas de recuperación y me faltan ocho, hasta que me pueda parar y darle todo el peso de mi cuerpo a mis talones”, continuó Vero.
Como las botas especiales que tiene que usar son extremadamente pesadas, solo las usa cuando está sola en su casa y deja respirar la herida. “Si todo va bien, mañana me sacan los puntos. Lo que podría hacer en primera instancia sería pararme en el agua y ahí practicar, pero es fundamental que no haga lío en esta etapa, que no me adelante”, explicó.
Sobre el día de la operación, contó una anécdota que divirtió mucho a sus compañeros de Cortá por Lozano. “Algo simpático es que me dijeron que me tenían que hacer un test de embarazo. ‘Lo único que faltaba’, decía. ‘Pero no había chances. Y tenía miedo el día de la intervención, me hicieron firmar las dos piernas, ellos también las firmaron, porque parece que a veces se equivocan los médicos, no sé, te sacan un riñón”, cerró.
El fuerte testimonio de Analía Franchín sobre la caída de Vero Lozano
Analía Franchín estaba al lado de Vero cuando ocurrió el accidente. Según contaron, la conductora estaba subiéndose a la aerosilla pero nunca logró a acomodarse bien y empezó a arrancar. “La silla fue avanzando y ella fue avanzando con los esquíes hasta que se dio cuenta que se quedaba sin piso y atinó a girar y agarrarse del asiento. Cuando la silla avanzó ya sabíamos que se venía algo horrible y cuando frenó ya estaba como muy alto”, comenzó, en diálogo con La Once Diez.
Mientras el personal de las aerosillas no hacía nada, ya que la música del lugar estaba muy alta y no escucharon sus gritos de auxilio de Franchín y la instructora, que estaban con ella en ese momento e intentaron agarrarla. “La sensación de que alguien se te va de las manos es terrible, es una película de terror. Tenía su peso solo con las dos manos, y yo la agarraba con una mano y Magda, la instructora, la agarraba con otra, pero al mismo tiempo nosotras nos teníamos que agarrar de la silla porque tampoco teníamos baranda”, continuó Franchín.
Analía describió la situación como “minutos de desesperación, de gritos”. Desde afuera, todas las personas que estaban ahí miraban paralizadas cómo Vero colgaba de la aerosilla. “Era una secuencia de terror. Esto no es un accidente de esquí, es una negligencia de pelotudos. El señor de la silla de adelante, mientras yo gritaba y lloraba, me dice ‘en 35 años de esquí no vi algo igual’”, cerró.