“Muerte dudosa”: así fue caratulada la muerte de la mujer que falleció tras darse la Sputnik V
La víctima había ido a vacunarse a San Lorenzo y se descompensó. El fiscal ordenó una autopsia y secuestró frascos de varias dosis.
En la mañana de este viernes una mujer de 86 años murió en el Centro de Vacunación del Club San Lorenzo luego de aplicarse la segunda dosis de la vacuna Sputnik V. Ahora, la Justicia se puso al frente de la investigación.
En este sentido, César Augusto Troncoso, titular subrogante de la Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional 55, quedó a cargo de la causa y ordenó una autopsia sobre el cuerpo de la víctima.
De momento, la causa está caratulada como “muerte dudosa”, y hay varias hipótesis planteas en la investigación: una reacción alérgica a la vacuna, un derrame o un problema cardíaco. Las precisiones surgirán del análisis del cuerpo que se está realizando en la morgue judicial.
Además, se secuestraron frascos de vacunas de la posta sanitaria ubicada en el club de Boedo, que serán debidamente analizados.
Según informaron fuentes cercanas a la investigación, en principio, la mujer no llegó al lugar sintiéndose mal y tampoco tenía alguna enfermedad preexistente. No obstante, el fiscal requirió la historia clínica de la víctima para constatar cómo era su estado de salud.
Cómo se desencadenó la muerte de la mujer de 86 años en San Lorenzo
Según fuentes del gobierno porteño, una vez que la señora recibió la vacuna, fue a la sala de espera acompañada por su hijo. Ahí iba a aguadar los 15 minutos que indica el protocolo. En ese momento se descompensó por lo que se contactó al SAME de manera inmediata, y en 5 minutos una ambulancia llegó al lugar. El equipo médico la asistió y le realizó RCP pero, a pesar de todos los esfuerzos, falleció.
Su hijo recibió acompañamiento clínico y psicológico por parte de profesionales especializados, según informaron desde el Ministerio de Salud porteño. Si bien durante un tiempo debió suspender la vacunación en San Lorenzo por este episodio, luego pudo retomarse normalmente para cumplir con todos los turnos otorgados para el día de la fecha.
“El hijo me contó que la mujer desayunó tranquila y que estaba contenta. Que se sentó para esperar los 15 minutos de rigor después de la aplicación, pero que enseguida le dijo que estaba mareada y se desplomó”, contó a los medios Gabriel Battistella, subsecretario de Atención Primaria, Ambulatoria y Comunitaria del Ministerio de Salud porteño.
Vale recordar que en los últimos días falleció Santiago Gerónimo, que era jefe de la guardia del Hospital Arturo Illia, en Alta Gracia, Córdoba. El médico, de 44 años, murió por Covid-19, a pesar de estar vacunado con las dos dosis de la Sputnik V. El dato clave es que la vacuna no es infalible ni bloquea la transmisión.