“No tenemos nada que esconder”
En conferencia de prensa, el ministro de Seguridad, Maximiliano Pullaro, se refirió a las escuchas que lo involucran y a la gravedad de la intervención de su línea telefónica.
El ministro de Seguridad de la Provincia, Maximiliano Pullaro, brinda una conferencia de prensa para aclarar cuestiones referidas a escuchas telefónicas que lo involucran y que ayer se hicieron públicas.
Al respecto, Pullaro manifestó que “tenía necesidad de informar y comentar la situación que me toco vivir”, y dijo que “ayer me anoticio por medios de comunicación que pudiesen existir escuchas telefónicas de una línea que utilizo, que es la línea que tengo del gobierno de la provincia y que uso como ministro”, y calificó que las escuchas son “un hecho inusual en la historia del gobierno de la provincia”.
“Esa intervención telefónica tendría fundamentos en una causa anterior que tenía que ver con la investigación de las horas Ospe”, explicó el ministro, quien al referirse a las transcripciones difundidas de esas escuchas, mencionó que son “diferentes conversaciones que tengo con jefes de unidades regionales, hacíamos referencia a un concurso de ascenso, con policías que estaban en condiciones de pasar” en el concurso.
Para despejar dudas, Pullaro adelantó que “estas transcripciones las vamos a acercar (a los medios de comunicación) y les vamos a dar el audio, porque no tenemos nada que esconder”, y aclaró que esas llamadas “bajo ningún concepto figuran como un delito”, y agregó que “si ese fuese el motivo de la intervención telefónica a la línea asignada al ministro, estaríamos hablando de un gravedad institucional inusitada”.
Denuncia penal y denuncia administrativa
Pullaro sostuvo que “hoy por la mañana, en función de estos elementos que salieron en diferentes medios de comunicación, presenté ante el Ministerio Público de la Acusación una denuncia penal y una denuncia administrativa para que se investigue esta situación, al menos difícil de comprender. Penal, porque puede existir un delito penal, si es que la escucha es ilegal o irregular; y administrativa porque también queremos que se investigue de qué manera se pidió esta escucha”.
“Más allá de que no tengo absolutamente nada para ocultar, bajo ningún concepto -y si se fundan en esas dos escuchas telefónicas que el propio fiscal le acercó al gobernador de la provincia de Santa Fe, que un órgano superior dijo claramente que no hay tipicidad delictual de una causa que se cayó a pedazos- podemos presumir que se trata de una operación política o de sectores oscuros que pretenden golpear la política pública de Seguridad en la provincia de Santa Fe”.
En este sentido, el ministro mencionó “dos o tres cuestiones que me preocupan sobremanera” y enumeró: “En principio, para que a cualquier vecino se le haga una intervención telefónica tiene que haber una justificación muy fuerte pero a mí, como ministro de Seguridad, en una línea oficial fundamentalmente llevo adelante conversaciones que tienen que ver con mi función. Y hoy tenemos dudas de muchas situaciones que se dieron en el último tiempo en la provincia de Santa Fe que son coincidentes con el tiempo que pudiese existir esa intervención telefónica”, describió.
“Yo tengo charlas con jefes de policías; tengo charlas en las que doy órdenes operativas de procedimientos que llevamos adelante; me informan sobre diferentes causas e investigaciones que se llevan adelante relacionadas con narcotráfico, microtráfico, crimen organizado, violencia urbana, prioridades en la persecución penal y en las investigaciones que se llevan adelante en la provincia de Santa Fe. Esto es grave y tiene gravedad institucional”, afirmó en la conferencia de prensa en la cual estuvo acompañado por el ministro de Justicia y Derechos Humanos, Ricardo Silberstein.
Además, aseguró que “durante mucho tiempo nosotros vimos cómo charlas que teníamos salían reflejadas en diferentes portales de la provincia. Y cuando hablábamos y discutíamos con jefes e intelectuales sobre la reforma policial que llevamos adelante en la provincia, no entendíamos por qué esas charlas también se veían reflejadas en diferentes lugares”.
“Cómo se cayeron de manera inexplicable algunos operativos y fracasaron algunas investigaciones. Parecía que tenían la varita mágica o que me leían la mente”, sostuvo Pullaro y a modo retórico preguntó: “¿Quién tiene hoy toda esa información que se recabó en escuchas, al menos irregulares, en la provincia de Santa Fe? Si existe una causa penal, ¿cómo se filtra a diferentes medios de la provincia de Santa Fe?”.
El ministro dijo estar convencido de que esas acciones “pretenden golpear la política pública de seguridad que llevamos adelante. Hoy eso se sabe. Se sabe todo en la provincia de Santa Fe. Lo saben ustedes como periodistas, lo saben los delincuentes, lo saben los abogados. Charlas que tuve con periodistas, con jefes policiales, con ministros y secretarios del Ejecutivo nacional, con el propio gobernador de la provincia, con ministros de la provincia, con legisladores”, detalló.
“Hoy, esos que pretendieron golpear la política pública de seguridad en la provincia de Santa Fe desde el primer día, saben qué hace mi familia, saben qué hacen mis hijos, saben a qué escuela van, saben a qué club van, saben cuáles son sus entretenimientos. Por eso hoy tuve que ordenar, por primera vez en estos 23 meses, una custodia para mi familia, cosa que no había querido hacer, pero lamentablemente esos tipos, que son quienes pensaron esto desde hace mucho tiempo, supieron y saben hoy cada uno de mis pasos y los de mi familia. Queremos que se investigue, queremos que se sepa y queremos ver a los responsables”, agregó.
Respecto de la llamada causa Horas OSPE, mencionó que “sabía desde hace tiempo de 26 o 27 irregularidades que le entregamos al Ministerio Público de la Acusación. Sabíamos que eso iba a tener por lo menos un llamado a imputativa sobre fin de año, pero no nos pretendan poner en un lugar en el cual no estamos. Nosotros desde el primer día que llevamos adelante la conducción del Ministerio de Seguridad de la provincia de Santa Fe, dijimos que íbamos a separar la paja del trigo y así es como tenemos más de 2300 sanciones administrativas, más de 600 pases a disponibilidad de policías que cometieron irregularidades, más de 150 destituciones, exhoneraciones y apartamiento de muchos policías”.
“No nos van a hacer retroceder”
Pullaro aseguró que “las operaciones oscuras y sistemáticas no nos van a hacer retroceder. Los sectores que perdieron privilegios en la provincia de Santa Fe quieren frenar la reforma policial que se viene llevando adelante en esta provincia desde hace mucho tiempo”.
“No nos va a frenar bajo ningún concepto ninguna de estas operaciones berretas. Pero sí les decimos a esos tipos que la armaron y que trabajaron fuertemente para golpear a un Poder del Estado en la provincia de Santa Fe, primero que no nos van a amedrentar y segundo que si cometieron un delito penal los queremos ver presos y si no, queremos ver las sanciones administrativas. Porque esto fue grave y no vamos a parar pero la reforma y la política de Seguridad que fue golpeada desde el primer día en la provincia de Santa Fe, lamento decirles, que no se va a frenar”, concluyó el ministro.
Presentes
También estuvieron el senador departamental Felipe Michlig y los diputados provinciales Rubén Galssi, Jorge Henn, Julio Garibaldi, Victoria Tejeda, Estela Yacuzzi y Fabián Palo Oliver.
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