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Perú: robó un tráiler y terminó detenido luego de una espectacular persecución policial
Los hechos se desencadenaron cuando el chofer, empleado de una empresa de transporte de carga, tomó la decisión temeraria de sustraer el vehículo que manejaba.
En una madrugada cargada de tensión y peligro, la Carretera Central se convirtió en el escenario de una persecución digna de las películas de acción. Cuando las autoridades policiales se vieron enfrentadas a un desafiante conductor que intentaba escapar con un tráiler de color blanco con placa AVC-973 de marca Volvo robado. Josué Vargas Huarcaya, de 33 años, protagonizó esta audaz huida, desencadenando una persecución por las calles de Ate.
Los hechos se desencadenaron cuando el chofer, empleado de una empresa de transporte de carga, tomó la decisión temeraria de sustraer el vehículo que manejaba para cumplir con una diligencia laboral. Sin embargo, sus intenciones fueron descubiertas por la dueña del tráiler, Sandra Campos, gracias al GPS, quien rápidamente alertó a las autoridades y desató una respuesta policial sin precedentes.
Así fue la dramática persecución
Las cámaras de seguridad captaron el dramático momento en que más de 15 vehículos de la Policía Nacional del Perú (PNP) iniciaron una persecución a alta velocidad en la intersección de la Carretera Central y la Avenida Marco Puente Llanos, en Vitarte, en un esfuerzo por detener al conductor prófugo. Durante más de 40 minutos, se vivió una persecución que parecía sacada de una película, con sirenas y disparos resonando en la oscuridad de la noche.
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La determinación de las fuerzas del orden fue evidente cuando, en medio de arriesgadas maniobras, lograron cerrar el paso al tráiler en varias ocasiones, solo para ver cómo el fugitivo continuaba su escapada con desesperación. Incluso, choques directos contra vehículos policiales no fueron suficientes para detener la marcha del sujeto.
La situación se convirtió en un peligroso juego de gato y ratón y alcanzó su punto crítico cuando los agentes se vieron obligados a recurrir al uso de armas de fuego para neutralizar al delincuente. A pesar de los 33 disparos que impactaron en el vehículo, Vargas persistió en su intento de fuga, hasta que finalmente una bala alcanzó su cuerpo, obligándolo a detenerse y rendirse ante la justicia.
El seguimiento incluyó la Avenida Central, la Calle San Martín, la Calle Las Marianas, la Calle Tagore y el Bypass de la Carretera Central. Finalmente, el desesperado conductor colisionó contra un poste de alumbrado público en el kilómetro 8.9, cerca de Molicentro, en la vía hacia Chosica, Lima.
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El desenlace de esta persecución dejó un rastro de destrucción a su paso. Tres unidades policiales resultaron afectadas, junto con el tráiler, que presentaba múltiples impactos de bala en su carrocería y neumáticos. El conductor, herido de bala en el torso, fue trasladado de urgencia al Hospital de Vitarte, donde recibió atención médica antes de ser puesto bajo custodia policial.
El robo se evitó gracias a la dueña
Sandra Campos, la víctima del presunto robo, fue quien alertó a las autoridades sobre la desviación del tráiler mediante el GPS del vehículo, desencadenando así una rápida y eficaz respuesta por parte de la policía y serenazgo del distrito.
El caso de Josué Vargas Huarcaya será ahora llevado ante las autoridades correspondientes, quienes deberán determinar las consecuencias de sus acciones y garantizar que se haga justicia. Mientras tanto, la ciudad respira aliviada tras el fin de esta espectacular persecución, que puso a prueba la determinación y el profesionalismo de las fuerzas del orden.