Pese a que precio del trigo bajó, el pan aumentó un 3,4% en junio
El precio del trigo cayó un 39% desde el pasado 17 de mayo: pasó del pico de U$S 469,40 por tonelada a los U$S 285,41 que cerró la posición de septiembre el pasado viernes 17 de julio en el mercado de Chicago.
En contraposición, el precio del pan tuvo un alza del 3,4% durante junio, según los números del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC), que reportó una inflación promedio del 5,3% entre todos los productos analizados.
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De hecho, el presidente Alberto Fernández anunció semanas atrás que se iniciaría una “guerra contra la inflación”. En ese sentido, el Gobierno también subió las retenciones a los derivados de la soja, del 31% al 33%, para financiar con ese incremento al Fondo Estabilizador del Trigo Argentino, que subsidiaría con US$ 420 millones a las bolsas de harina 000, para tratar de abaratar al pan.
Sin embargo, la medida ha sido criticada no solo por los productores agropecuarios, sino también por los propios molineros que reciben el subsidio, al argumentar que la incidencia del trigo en el pan es menor. De hecho, desde la Fundación Agropecuaria para el Desarrollo de Argentina (FADA) indicaron que este cultivo representa un 13% en la formación del precio de ese alimento. Mientras que los molinos significan un 5%, los impuestos un 22% y las actividades y costos en panaderías un 60%.
Los motivos de la baja del trigo
En este contexto, la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) analizó los factores que inciden en la baja de la cotización de los granos. “En los últimos 2 meses, los futuros de trigo cayeron cerca de un 20% en MatbaRofex y más de un 36% en Chicago. Mejoras productivas, avances diplomáticos y cierres de posiciones explican gran parte de esta dinámica”, explicaron los analistas Guido D’Angelo y Bruno Ferrari de la entidad santafesina.
“Un 2022 que comenzaba con leves cambios en los precios del trigo, se topó con el desenlace bélico de la crisis ruso-ucraniana a finales de febrero. Algunas semanas después de la incursión rusa a Ucrania, los futuros tanto locales como estadounidenses llegaban a máximos nominales históricos. Con el conflicto, creció fuertemente la incertidumbre, ya que más de un tercio del comercio mundial de trigo se embarca en la región del Mar Negro”, analizó el reporte.
Pero ahora, detallaron los expertos, se presentaron 3 factores que explican, en gran medida, las bajas recientes de los precios. Entre estos, la mejora en las perspectivas productivas a nivel mundial, el avance de las conversaciones diplomáticas en torno a la crisis ruso-ucraniana y los cierres de posiciones por parte de los principales fondos de inversión, en un contexto de alza en las tasas de interés a nivel internacional. A su vez, en lo que respecta a lo productivo, no se daría el desastre que se esperaba a nivel global.
“La campaña 2022/23 a nivel global se avizoraba complicada en muchos frentes: sequías en India, China y la Unión Europea, principales productores, acompañada de problemas en Estados Unidos, Australia y en nuestro país. En China, principal productor a nivel mundial, la condición del trigo de primavera era la peor de la historia hasta hace unos meses, según informaba el propio Ministerio de Agricultura del gigante asiático”, recordó la entidad santafesina.
Sin embargo, el panorama productivo mundial fue mejorando con el tiempo y se espera que la campaña 2022/23 cierre con una merma de solo el 1% en la producción del cereal, como lo mostró el último reporte sobre Oferta y Demanda Mundial de Productos Agrícolas (WASDE), publicado por el Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA, por su sigla en inglés).
Asimismo, el comercio mundial de trigo aspira a crecer 2,5% y superar las 205 millones de toneladas, lo que significaría un “máximo histórico”. Al compás de ello, la cosecha del cereal estadounidense se viene ajustando al alza y por encima de las expectativas de los operadores. “Con una demanda creciendo a menor ritmo, mes a mes mejoran también los stocks finales que se esperan para la campaña actual de la potencia norteamericana, lo que impulsa hacia abajo los precios”, analizó el informe.
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El panorama en el mercado local
En los puertos de Rosario, explicó la BCR, la cautela comercial se notó especialmente el pasado martes 12 de julio, día de publicación del WASDE y de bajas de cotizaciones, tanto en el mercado local como en el estadounidense.
“Para el miércoles, la actividad comercial repuntó notoriamente, reincorporándose ofertas por trigo 2022/23 para diciembre en US$ 290 por tonelada, al tiempo que la descarga más cercana se ubicaba en US$330″, señaló el reporte.
En este contexto, el volumen de negocios para la campaña venidera mira con atención la evolución del trigo tanto en zona núcleo, así como en provincia de Buenos Aires. “En su último informe semanal, GEA (Guía Estratégica para el Agro de la BCR) recortó aún más la superficie del trigo argentino, totalizando 5,9 millones de hectáreas, un millón de hectáreas menos que la campaña pasada”.
Por otra parte, las estimaciones del ministerio de Agricultura de la Nación, por ahora con una superficie de 6,4 millones de hectáreas, dan cuenta de un avance de siembra del 88% de la superficie objetivo, 7% por debajo de la campaña pasada. “Merece la pena destacar que esta demora relativa es aún más importante, si consideramos que la superficie de la campaña pasada, de acuerdo con el ministerio, se ubicaba en 6,7 millones de hectáreas”, pormenorizó el reporte.
