Piden que se retomen dos juicios de lesa humanidad bajo modalidad virtual
Se trata de la Megacausa de Campo de Mayo, que se sustanció ante el Tribunal Oral en lo Criminal Federal 1 de San Martín con la participación de todas las partes a través del Sistema de Videoconferencias del Poder Judicial de la Nación; y del juicio a la CNU que se llevó a cabo ante el Tribunal Oral en lo Criminal Federal de Mar del Plata, en la que el único testigo de la jornada habló desde Suecia, donde está radicado.
En San Martín declararon de manera remota Flavia y Lorena Batisttiol, por el secuestro de sus padres Juana Colayago, que se encontraba embarazada, y Egidio Batisttiol, secuestrados el 31 de agosto de 1977 en Boulogne. También testimoniaron María Esther y Roberto Landaburu, por el secuestro de su hermana Leonor Landaburu, también embarazada, y su marido Juan Carlos Catnich.
Precisaron que en el debate de Mar del Plata se escuchó el testimonio de Ricardo Leventi, que declaró por videoconferencia desde Suecia donde está radicado hace más de 30 años, y que entre los años 1975 y 1976 fue un militante de la izquierda peronista que fue perseguido y víctima del accionar violento de la CNU.
En la sede del Tribunal lo escucharon las querellas y la defensa del imputado Ullúa, mientras que los jueces y la fiscalía lo hicieron en la Cámara de Casación Penal de Comodoro Py.
Las audiencias fueron las primeras testimoniales que se realizan luego de que la Cámara Federal de Casación Penal recomendara a los tribunales orales que “procedan en consecuencia, con observancia de las medidas emanadas de la autoridad sanitaria” respecto de los procesos “cuya conclusión permita realizarse por vía remota y/o que fuere posible sin gran desplazamiento de participantes”.
Verónica Bogliano, directora de Querellas por Crímenes de Lesa Humanidad, señaló que la continuidad de los juicios es de suma importancia y señaló que “desde la Subsecretaría pedimos que se reanuden las causas en esta cuarentena”.
“Es importante porque son debates en los que se juzgan delitos de lesa humanidad, que son crímenes que no pueden esperar más tiempo porque llevan una demora de muchos años por los años de impunidad que vivimos en el pasado. Los imputados son grandes, las víctimas son grandes, y si no se juzgan estos delitos va a terminar ganado la impunidad biológica”, señaló.
En línea con la recomendación y con la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación, la Subsecretaría recordó que se solicitó se realice de manera virtual el juicio por la causa “Pozo de Banfield y Pozo de Quilmes” en La Plata, cuyo inicio estaba pautado para el 5 de mayo y fue pospuesto por la cuarentena.