La tradición del 8 de diciembre:
¿Por qué los argentinos arman el árbol de Navidad en esta fecha?
El 8 de diciembre marca el inicio de la Navidad en Argentina, con la tradición de armar el árbol navideño.
El 8 de diciembre, Día de la Inmaculada Concepción de María, es una fecha clave para los católicos argentinos. Esta festividad religiosa, que celebra la concepción de María libre de pecado original, marca el inicio de la temporada navideña en el país. Por ello, muchas familias aprovechan la ocasión para decorar sus hogares con el tradicional árbol de Navidad, llenándolo de luces y adornos que simbolizan esperanza y unión.
Un legado cultural del siglo XIX
La costumbre de armar el árbol en esta fecha fue introducida en Argentina en el siglo XIX por Guillermo Furlong, un sacerdote jesuita de origen irlandés. Furlong llevó esta práctica desde Europa a Buenos Aires, donde rápidamente se popularizó entre las comunidades locales, consolidándose como una tradición nacional.
¿Cómo se celebra en el resto del mundo?
Mientras que en Argentina el árbol se arma el 8 de diciembre, en otros países la fecha varía. En Estados Unidos, por ejemplo, muchas familias lo arman en Acción de Gracias, el cuarto jueves de noviembre. En Alemania, el árbol se instala tradicionalmente el 24 de diciembre, justo antes de la Nochebuena. Por su parte, en Filipinas, el espíritu navideño llega temprano: algunos hogares comienzan a decorar en septiembre.
Un gesto de unión y significado espiritual
Armar el árbol de Navidad no es solo un acto decorativo. En muchas culturas, este símbolo verde representa la vida eterna y la esperanza. Las luces evocan la luz de Cristo, mientras que los adornos y la estrella coronando la cima recuerdan a los Reyes Magos y el camino hacia el pesebre.
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Cuidado en tiempos modernos
Con la inflación afectando el bolsillo de las familias argentinas, decorar el árbol puede ser un desafío económico este año. Sin embargo, las soluciones creativas y sustentables, como adornos reciclados o hechos a mano, permiten mantener viva esta tradición sin comprometer el presupuesto. Además, es fundamental considerar la seguridad de las mascotas durante estas festividades para evitar incidentes con los adornos o cables de las luces.
El armado del árbol de Navidad sigue siendo una expresión única de fe, familia y cultura, adaptada al contexto de cada hogar pero siempre conectada con una profunda tradición histórica y espiritual.