¿Se van a la casa?: los rugbiers se probaron tobilleras electrónicas
Ante la noticia del procedimiento, que hace pensar en una cercana prisión domiciliaria para los jóvenes acusados de matar a golpes a Fernando Báez Sosa, la familia de los detenidos no hizo declaraciones en una nueva jornada de visitas al penal de Dolores.
La prueba de las tobilleras y la visita a los domicilios de cada uno de los detenidos, es parte de un trámite de rutina que se realizó después de que el abogado defensor, Hugo Tomei pidiera las domiciliarias. Pero eso no implica que la prisión domiciliaria se les otorgue de forma inmediata sino que está siendo evaluada por el juez.
Si se les otorga la prisión domiciliaria los ocho acusados podrán regresar con sus familias, como lo hicieron Alejo Milanesi y Juan Guarino. El juez David Mancinelli podría evaluar la situación individualmente, con citaciones por separado a cada uno de los detenidos en audiencias a las que se convocará a las partes si es que ocurren.
Luego de haber dejado en libertad a Juan Pedro Guarino y Alejo Milanesi, Mancinelli abrió otro expediente para analizar si hace lugar o no al pedido de la morigeración de la prisión preventiva que hizo la defensa, para que los rugbiers puedan cumplirla de manera domiciliaria.
Máximo Thomsen (20) y Ciro Pertossi (19) están detenidos bajo los cargos de ser “coautores” de homicidio agravado por el concurso premeditado de dos o más personas” de Fernando Báez Sosa, y a Luciano (18) y Lucas Pertossi (18), Enzo Comelli (19), Matías Benicelli (20), Blas Cinalli (18) y Ayrton Viollaz (20) “participes necesarios”.
Este jueves los familiares visitaron nuevamente a los detenidos pero salieron sin hacer declaraciones a la prensa.