Tía Maruca planea volver a exportar a países limítrofes
Tras un 2019 muy complicado, la fabricante de galletitas logró recuperar su producción gracias a un acuerdo con sus proveedores. Busca retomar en corto plazo clientes en Brasil, Uruguay y Paraguay.
Tía Maruca, la firma nacional que produce galletitas, cerró un 2019 signado por la crisis económica. Fue el año en que solicitó la apertura del concurso de acreedores, aquejada por las altas tasas de interés y la caída del consumo. Sin embargo, con la herramienta del concurso, la negociación de mayores plazos de sus proveedores y la expectativa de la reaparición del crédito, la empresa apuesta a una recuperación de ventas este año y hasta se plantea volver a exportar a países limítrofes.
La compañía liderada por el empresario Alejandro Ripani llegó a ser la segunda firma más grande de la Argentina en producción de galletitas, con alrededor de 3 millones de kilos al mes hasta octubre de 2018. Pero los vaivenes de la economía argentina le jugaron una mala pasada, hasta acumular una deuda por alrededor de $250 millones que hoy está concursada.
Según detallaron a Ámbito Financiero fuentes de la firma, hoy su producción total, en sus plantas ubicadas en las provincias de San Juan y Buenos Aires, está en alrededor de 1,9 millones de kilos al mes. Están operando con capacidad ociosa porque no cuentan con el capital de trabajo suficiente para la compra de materias primas, aunque destacan que la demanda de sus productos en el mercado interno continúa sostenida. “Lamentablemente en algunas zonas tuvimos que bajar el abastecimiento. Nuestro cuello de botella es el financiamiento, pero afortunadamente nuestros proveedores están volviendo a confiar y nos están brindando mejores plazos”, explicaron.
Por el momento, el concurso de acreedores se encuentra recién en la etapa de verificación de deudas pero desde la empresa remarcan que esperan que todo avance rápido para comenzar a sanear cuanto antes sus cuentas. Mientras tanto y a pesar de que no están trabajando al 100% de su capacidad continúan conservando las fuentes laborales de sus más de 600 trabajadores. “Apostamos a que en breve volvamos a ser los de antes, pero el capital de trabajo es clave. A pesar de que estemos concursados, creemos que en algún momento podremos acceder algún tipo de crédito del Gobierno que lance para las empresas pymes, que hoy realmente es muy necesario”, explican desde la firma.
En este marco y dentro de sus planes para levantar cabeza se encuentra el proyecto de volver a exportar a países limítrofes. Actualmente están tramitando las habilitaciones correspondientes y la cuestión se cristalizaría en las próximas semanas. “Tenemos pedidos de Uruguay, Paraguay y Brasil, este mercado tiene mucho por crecer y quizás ahí se abre una ventana muy importante para el futuro de la empresa. La fábrica que tenemos en San Juan es reconocida regionalmente y tiene todo para abastecer tanto al mercado interno como al externo, por eso concretamos esa inversión y no queremos desaprovechar las oportunidades que se nos presentan”, remarcaron los responsables de la compañía.