Tokio pide evitar salidas e impulsa cierres de comercios por el coronavirus
Los datos de contagios y muertes son relativamente bajos -con unos 2.000 decesos y 135.400 contagios-, pero actualmente el archipiélago nipón registra cifras récord de casos diarios.
Las autoridades de Tokio pidieron este miércoles a sus habitantes evitar salidas innecesarias y priorizar el teletrabajo, además de instar a los comercios que venden alcohol a cerrar más temprano en un intento por neutralizar un incremento en los contagios de coronavirus y ante la preocupación por que colapse el sistema sanitario en el país.
“Querría pedir a los habitantes de Tokio que eviten tanto como sea posible salidas que no sean indispensables, para prevenir un aumento del número de infecciones”, declaró la gobernadora de la capital, Yuriko Koike, en una rueda de prensa.
Los datos de contagios y muertes son relativamente bajos -con unos 2.000 decesos y 135.400 contagios, según las cifras oficiales- en este país que no impuso medidas de confinamiento como sí lo hicieron otras naciones, pero actualmente el archipiélago nipón registra cifras récord de casos diarios.
Estas medidas, que incluyen un pedido a la población para que quienes puedan trabajen desde sus hogares, no son de carácter obligatorio.
Durante el estado de emergencia declarado en la primera ola pandémica, en abril pasado, tampoco hubo sanciones para las personas que no permanecían en casa o las tiendas que se negaron a cerrar.
La gobernadora también pidió a los comercios que venden alcohol que cierren a las 22 a partir del sábado, durante tres semanas, prometiendo que las empresas que lo hagan obtendrán ayudas, informó la agencia de noticias AFP.
La asociación médica de Japón advirtió que “el sistema sanitario corría el riesgo de derrumbarse en todo el país”.
“Si el número de infecciones aumenta rápidamente, no tendremos (suficientes) camas para los enfermos de coronavirus y otros” pacientes, declaró su presidente, Toshio Nakagawa.
La semana pasada, el primer ministro Yoshihide Suga declaró que Japón se encontraba en “alerta máxima” tras registrar un número récord de infecciones diarias, y el Gobierno tuvo que renunciar a una polémica campaña para promover el turismo interior.