Un joven rosarino perdió la vida en un accidente laboral, y su familia creó una fundación en su memoria
La organización estará enfocada en la formación educativa y en las oportunidades laborales. Ya cuentan con personería jurídica. “Ante lo inevitable elegimos seguir levantando las banderas de la lucha constante”, afirmaron.
Pablo Rodríguez
El 26 de mayo del 2021, Brian Albornoz de 28 años, perdió la vida mientras trabajaba en una planta fabril de Villa Constitución. El joven rosarino sufrió una caída de aproximadamente 6 metros en una fosa cuando se encontraba desempeñándose como inspector mecánico en el Tren Laminador 2 de la empresa.
El accidente motivó en ese momento un operativo de aeroevacuación, para trasladarlo desde el Centro Médico Rivadavia hacia el Sanatorio Parque, de Rosario. El joven permaneció internado hasta el 11 de junio de ese año, cuando finalmente falleció.
Hoy, a poco más de un año de la dura pérdida, familiares y amigos, crearon una fundación sin fines de lucro, a la que bautizaron “Brian Emmanuel Albornoz”, que, entre otras cosas, estará destinada a facilitar la formación de personas que no puedan acceder al estudio y otorgará becas. También piensan trabajar en la capacitación buscando conectar empresas con escuelas para simplificar el acceso a pasantías.
“Brian era un ser de luz que modificaba los ambientes por los que pasaba. Aportaba alegría, entusiasmo y respeto, creía fervientemente en las oportunidades y siempre estaba dispuesto a colaborar con quienes las buscaban. Nos parece que esta es una buena forma de honrar su memoria”, contó su papá, Jorge Albornoz.
El armado de la Fundación tiene una estructura llena de simbología. Su mamá Ariadna Panno es su presidenta y su hermano Franco es el vice. El resto de la comisión se completa con su padrino, su madrina, su prima, un amigo de la infancia como representante de su niñez, tres personas más que representan los espacios laborales más importantes por los que transitó él y su familia.
“El objetivo de becar a estudiantes y conseguir pasantías, tiene que ver con la convicción que tenía Brian de buscar y colaborar en la búsqueda de oportunidades”, ponderó Jorge Albornoz.
El padre de Brian, remarcó en este sentido que “pasar por una tragedia no te hace experto” en el tema, sino que “simplemente te hace parte de ellas”. “Está en uno poder encontrar las formas de transitarlo de la manera que se pueda con los recursos y herramientas que se tengan o se encuentren en el proceso. Te invade el dolor, la angustia y la tristeza”, dijo.
Jorge, admitió que en medio del “estupor de lo inexplicable” y de la “herida emocional y el golpe”, decidieron tomar todo esto y hacer con ello algo que sume, que “aporte a la sociedad y que nos permita sentir que podemos caminar este trayecto acompañados por su luz”.
Finalmente, reflexionó: “Celebramos el milagro de haber podido conocerlo, ser su familia, compartir charlas, risas, tristezas y alegrías. Celebramos los abrazos y la vida, porque ante lo inevitable elegimos seguir levantando las banderas de la lucha constante”.