Venganza fallida
Una ajedrecista intentó envenenar a su rival, pero todo le salió muy mal: fue descubierta y ¡le ganó igual!
El accionar de la mujer quedó registrado en las cámaras de seguridad. Su contrincante se descompuso pero se recuperó y se impuso en la partida.
Amina Abakarova, de 40 años, tenía un problema personal con su rival, Umayganat Osmanova, de 30 años. Según la acusada, su contrincante había estado hablando mal de su familia y para ella esa fue razón suficiente para intentar envenenarla durante la partida.
Abakarova fue descubierta porque su macabro plan fue captado por las cámaras de seguridad del lugar. En las imágenes se la observa recorrer lentamente el salón donde se disputaría el campeonato, camina entre las mesas que tienen los tableros montados y se detiene junto a la que le había sido designada a ella.
Miró para los costados y al advertir que no había testigos, sacó de su cartera el mercurio, lo esparció por la mesa y se fue. Tal como revelaron los investigadores, la mujer había visto las cámaras, consultó sobre ellas y le aseguraron que estaban en desuso.
La víctima se descompensó pero retomó la partida y le ganó igual
Osmanova empezó a sentirse mal en la mitad de la partida y tuvo que ser atendida por los médicos. Estuvo unos minutos fuera de juego, pero después se recuperó y retomó la partida que, a pesar de todo, ganó.
Un juez del torneo alertó a la policía sobre el sospechoso malestar de la ajedrecista y eso derivó en que se revisaran las filmaciones. Allí descubrieron el despiadado plan de Abakarova. La ajedrecista admitió su culpabilidad y le dijo a la policía que había esparcido mercurio por toda la superficie.
Su accionar tuvo que ver con una rivalidad previa al campeonato. Según la acusada, Osmanova había iniciado el conflicto entre ellas con comentarios desafortunados acerca de su familia y de ella misma, después de que le ganara en un torneo anterior.
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La ministra local de Deportes, Sazhida Sazhidova expresó su asombro con todo lo ocurrido durante el campeonato: “Estoy perpleja por lo que pasó, y los motivos de una competidora tan experimentada como Amina Abakarova son incomprensibles”, manifestó.
“Las acciones que llevó a cabo podrían haber tenido un resultado muy trágico, amenazando la vida de todos los presentes, incluida ella misma”, agregó la ministra, notablemente conmocionada por la situación.
Abakarova había ganado el Campeonato Federal de Ajedrez del Cáucaso Norte en la cercana Pyatigorsk y actualmente trabaja como entrenadora de ajedrez en una escuela de Makhachkala. Ahora, fue acusada de infligir intencionalmente lesiones corporales y si la Justicia la declara culpable podría ser condenada a tres años de cárcel.
