Se investiga
Ya son tres los detenidos por el asesinato de Carlos Farías en un comercio de la peatonal santafesina
Se trataría de una persona que mantiene un vínculo sentimental con la empleada apresada el viernes en el local junto a otro varón.
La investigación por el crimen de Carlos Alberto Farías, el hombre asesinado en la peatonal San Martín de la ciudad de Santa Fe esta semana, avanza en el más estricto hermetismo. En las últimas horas, trascendió que un tercer sospechoso fue arrestado por la Policía de Investigaciones, por disposición del fiscal de la causa, Estanislao Giavedoni.
"Pelusa", como lo conocían sus íntimos a Farías, fue hallado la tarde de este viernes dentro de un local comercial céntrico dedicado a la venta de ropa, ubicado muy cerca de la esquina que se forma con calle Eva Perón, apenas unos metros al sur.
Peritos de la División Criminalística de la PDI y policías que acordonaron el local ubicado en peatonal San Martín casi Eva Perón. Foto: Pablo Aguirre
La víctima era intensamente buscada por sus familiares desde el miércoles. No era habitual que el hombre se ausentara sin explicar los motivos, así que esa misma noche se encendieron todas las alarmas de sus seres queridos.
Dos versiones
Existen versiones encontradas sobre cómo la policía llegó al negocio. Posiblemente, ambas sean ciertas.
Una sostiene que vecinos se comunicaron con las autoridades para quejarse de un olor nauseabundo que emanaba del inmueble.
La otra afirma que personal de la Dirección de Trata de Personas de la PDI se presentó allí luego de analizar videos de cámaras de vigilancia de la zona. En ellos se observaría a Farías cuando ingresaba al negocio, de donde nunca salió. Eso habría ocurrido el mismo miércoles de su desaparición, durante las primeras horas de la tarde. Su camioneta había quedado estacionada a la vuelta, en un garaje de calle 25 de Mayo.
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Cuerpo golpeado
A partir de entonces, la escena se pobló de peritos de la División Criminalística de la PDI y policías que acordonaron el lugar. Trascendió que el cuerpo estaba muy deteriorado y que evidentemente había sido asesinado días atrás, posiblemente el miércoles. Todavía no están claras las causas del deceso, pero sospechan que sería como consecuencia de fuertes golpes en distintas partes de su cuerpo.
Eran aproximadamente las 18 de este viernes y la gente comenzó a agolparse. La situación se tornó por demás de dramática a medida que fueron llegando familiares del "Pelusa", que ingresaron dentro del perímetro establecido por los uniformados. Gritos, llantos, recriminaciones a la policía e insultos al cielo se multiplicaron. Otras reacciones similares se observó en personas que se amontonaban del otro lado del vallado. El hombre era muy querido también por los comerciantes de la peatonal. Todos lo describen como un bueno hombre que no dudaba en dar una mano.
Pero el momento más fuerte se vivió cuando un patrullero se arrimó hasta la entrada del local y los policías subieron a dos personas que salieron esposadas, un hombre y una mujer que trabajan allí. Fue entonces que los allegados a Farías se abalanzaron sobre el móvil y lo golpearon fuertemente con manos y pies, mientras lanzaban insultos y amenazas a los arrestados.
Autopsia clave
Finalmente, ya cerca de las 21, el cuerpo de la víctima fue cargado en el vehículo especial de la Agrupación de Bomberos Zapadores que lo trasladó hasta la Morgue Judicial, donde se iba a practicar la autopsia ordenada por el fiscal Giavedoni.
El funcionario del Ministerio Público de la Acusación brindó entonces una conferencia de prensa, pero evitó dar mayores detalles de los que ya se conocían. Es más, ni siquiera se aventuró a confirmar la identidad del cadáver hallado, que iba a encomendar a personal especialmente capacitado para la tarea. Sobre los dos sospechosos, dijo que habían sido trasladados al sede policial en calidad de "demorados".
Tercer detenido
En las últimas horas fue arrestado un hombre que sería empleado de la Prefectura Naval Argentina y que tendría un vínculo sentimental con la mujer apresada el viernes.
Ella es representada por un estudio de abogados conformado por los doctores Daniel Rocca, Clemente Rodríguez y Catalino Portillo. Estos profesionales están convencidos de la inocencia de su clienta, por lo que pedirían su libertad en la audiencia imputativa.
