Beyoncé sorprendió en su show en París: bailó junto a su hija Blue Ivy y la rompieron
La pequeña, de solo 11 años, se convirtió en la estrella inesperada del último concierto de ‘Queen B’ en París, cuando se subió al escenario para bailar junto a su célebre progenitora.
Blue Ivy Carter, hija de Beyoncé y del rapero Jay-Z, sigue acaparando titulares a sus solo 11 años. La noche del pasado viernes lo hacía al subirse al escenario ante 80.000 personas, en el concierto de su madre en París. “Rendíos a Blue”, gritaba la intérprete de Crazy in Love mientras su hija se colocaba a su lado para bailar My Power, una de las canciones de la banda sonora de The Lion King: The Gift. Vestidas a juego, con pantalones cargo plateados y un suéter de cuello alto cubierto de cristales que centelleaban con cada uno de sus movimientos, Blue lució también unas gafas de sol mientras su madre se retiraba para cederle el centro del espectáculo: rodeada por los bailarines profesionales del tour y demostrando que lo lleva en los genes.
¿Entre el público del show? Innumerables celebridades como Selena Gomez, Lenny Kravitz, Natalie Portman, Kylie Jenner o Pharrell Williams. La cita forma parte de la gira mundial de la estrella, The Rennaissance World Tour, que arrancó el pasado 10 de marzo y llevará a Beyoncé por distintos países hasta el próximo mes de septiembre. En España solo se detendrá el 8 de junio en Barcelona, en una convocatoria en la que las entradas están casi agotadas.
Blue Ivy walking out on "bloodline" was SO ICONIC??? pic.twitter.com/i3ZZGpXFdZ
— ??????? (@beyoncegarden) May 27, 2023
Blue Ivy es la hija mayor del poderoso matrimonio musical, que también tiene dos mellizos de cinco, Rumi y Sir. No es la primera vez que la primogénita se convierte en centro de todas las miradas: su genio cuando pidió a sus padres que se calmaran en plena gala de los Grammy en 2018 la convirtió rápidamente en meme viral. También cuando exigió a los fotógrafos que dejaran de atosigarla en los MTV en 2016, cuando contaba con solo cinco años.
El evento de París tampoco era su primera vez sobre el escenario. En los Oscar de 2022 participó como bailarina en la interpretación de Be Alive de Beyoncé, que abrió aquella ceremonia cinematográfica, y el pasado mes de enero actuó en el Atlantis Royal Resort de Dubai, cantando junto a su progenitora Brown Skin Girl. Pero quizá su hito más sonado hasta la fecha lo alcanzó en 2021, cuando se convirtió en la tercera estrella más joven en ganar un Grammy, solo por detrás de Jaden Suárez León, del grupo Sophia, y de Leah Peasall. Lo consiguió por su participación precisamente en el videoclip de Brown Skin Girl.
La propia Beyoncé fue una niña precoz, empezó a cantar con cuatro años y supo desde bien temprano que lo que realmente quería era dedicarse a la música. Con solo ocho años entró en una banda infantil femenina, Girl’s Tyme en la que rapeaba y bailaba. En 1996 obtuvieron su primer contrato con una discográfica y aquel fue el inicio de Destiny’s Child, el grupo que llegó a vender 60 millones de discos antes de que ‘Queen B’ decidiera volar en solitario.
Blue Ivy junto a su padre, Jay-Z, en la final de la Super Bowl el pasado mes de febrero.
