El COVID-19 sigue batiendo récords en India
India anunció este jueves un récord de casi 4.000 muertes por coronavirus y más de 412.000 nuevas infecciones en 24 horas, al tiempo que las autoridades advirtieron que hay que prepararse para “nuevas olas”.
El Ministerio de Sanidad informó 3.980 muertes y 412.262 casos diarios, lo que eleva el total a 230.168 muertes y 21,1 millones de infecciones en India desde que comenzó la pandemia.
Algunos expertos creen sin embargo que estas cifras están muy subestimadas. El nuevo récord se produce tras varios días de descenso del número de casos, que había alimentado las esperanzas de remisión del brote, que empezó a fines de marzo.
Luego de alcanzar un máximo de 402.000 infecciones diarias el viernes pasado, la cifra descendió ligeramente a 357.000 y luego volvió a subir el martes.
Según los especialistas, lo peor está por llegar para este país de 1.300 millones de habitantes, con un pico epidémico que se alcanzaría dentro de varias semanas.
K. Vijay Raghavan, el principal asesor científico del Gobierno indio, advirtió que un “tercer episodio es inevitable dados los altos niveles” de infección actuales.
“Pero no está claro cuándo se producirá este tercer episodio. Tenemos que prepararnos para nuevas olas”, dijo en conferencia de prensa, informó la agencia de noticias AFP.
Sin embargo, el Gobierno del primer ministro Narendra Modi se niega a ordenar un confinamiento generalizado. Varias regiones, incluida la capital Nueva Delhi, y los estados de Bihar y Maharashtra sí se han confinado.
Otros estados como Bengala Occidental y Karnataka también registraron un fuerte aumento de contagios, al igual que Kerala, cuyo primer ministro, Pinarayi Vijayan, anunció un confinamiento de una semana.
La gestión de la crisis sanitaria por parte del Gobierno está suscitando cada vez más críticas, incluso en los tribunales, por la dramática situación que vive el sector sanitario, vetusto y con falta de financiación
Los pacientes con problemas respiratorios están muriendo a las puertas de hospitales abarrotados, donde faltan oxígeno y suministros médicos esenciales.
Once personas murieron anoche en un hospital cerca de la ciudad de Madrás por una caída de presión en las canalizaciones de oxígeno, informó el diario Times of India.
“Los ingresos se suspenden indefinidamente” debido a la falta de suministros de oxígeno, tuiteó Devlina Chakravarty, directora ejecutiva del hospital Artemis de Gurgaon, cerca de Nueva Delhi.
El Gobierno de Delhi dijo que necesita 700 toneladas de oxígeno al día para sus hospitales, pero la Corte Suprema supo el miércoles de que apenas se desplegarán 585 toneladas.
Finalmente, ante la amenaza de un procedimiento por desacato, los abogados del gobierno central argumentaron que la ciudad solo necesitaba 415 toneladas.
El tribunal dio al Gobierno hasta para presentar un plan de envío de suministross adicionales. El Tribunal Superior de Delhi acusó a los políticos y funcionarios del gobierno de “vivir en torres de marfil”.
Por su parte el Tribunal Superior de Allahabad, en el estado de Uttar Pradesh, dijo que dejar morir a tanta gente era “un acto criminal y nada menos que un genocidio”.
Los hospitales de Calcuta, Bangalore y otras grandes ciudades indias también sufren una grave escasez.
En los últimos diez días llegaron envíos de ayuda médica de emergencia, como generadores de oxígeno y respiradores, procedentes de Estados Unidos, Gran Bretaña y Europa, entre otros.