Gastó 54 mil dólares en tatuarse todo el cuerpo y quedó irreconocible
Con significados o no, realizarse tatuajes suele ser una acción que una vez que comienza es difícil de detener, según cuentan miles de personas que pasaron por esto. Ya sea un homenaje a algún familiar, una figura o una fecha en especial, los tatuajes son una tendencia muy común en jóvenes y que también tiene adeptos en adultos e integrantes de la tercera edad.
Sin embargo, pocos suelen gastar un dineral en tatuarse el cuerpo, como lo hizo un hombre de Dinamarca.
Se trata de Tristan Weigelt, un tatuador aprendiz de tan solo 25 años. El estadounidense (se mudó hace poco a Copenhague) lleva gasto más de 11 millones de pesos en tatuajes realizados sobre su cuerpo, dando como resultado una cobertura casi completa: lleva el 95% de su piel dibujada con tinta.
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En una entrevista con medios británicos, Tristan contó que en total lleva más de 260 horas tatuándose y que sus dibujos comienzan en la cabeza y terminan en los pies, pasando por brazos, espalda, pecho, abdomen, glúteos y piernas.
“Es un poco extraño mirarme a mí mismo sin todos los tatuajes. Pero, curiosamente, sigo sintiéndome exactamente igual que antes por dentro. Muchas personas miran y están bastante fascinadas. Mis amigos ahora dicen que es casi como caminar con una celebridad”, contó el norteamericano, quien solo tiene sin tatuar las palmas de sus manos, orejas y partes íntimas.
En consecuencia, el tatuador aconseja que quienes estén pensando en tatuarse por primera vez se animen a hacerlo y no se preocupen por el qué dirán, ya que esas inseguridades los acompañarán por el resto de sus vidas. Es por ello que sugiere ir en contra de las miradas que juzgan por creer que el tatuaje no es del estilo de esa persona.
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Además contó cuáles fueron los lugares más dolorosos en donde se tatuó, en donde destacó la cara y la cabeza. En esos casos tuvo que afrontar seis sesiones en días consecutivos, con más de cinco horas de duración. “Es como si te rasparan con un cepillo de metal”, remarcó Tristan.
Una rotunda comparación
“Me hice mi primer tatuaje en 2016 cuando tenía 20 años y desde entonces ha sido historia. Un largo viaje de dolor y sanación. Supe bastante rápido que quería tatuarme todo el cuerpo”, detalló el joven en una publicación en Instagram, donde exhibe todos sus dibujos. En una de ellas se puede ver una comparación para que sus seguidores idealicen los cambios del cuerpo con los tatuajes.