La provincia de Santa Fe continúa con el registro balístico de armas policiales
Hasta el momento, la Agencia de Prevención de la Violencia con Armas de Fuego (APVAF) peritó un total de 19.600 armas de fuego.
La Agencia de Prevención de la Violencia con Armas de Fuego (APVAF) continúa con el proceso de registración balística de las armas utilizadas por la Policía de la provincia. Esta herramienta permite identificar cada arma que utilizan los agentes de las fuerzas policiales. El proceso se realiza en el Departamento Logística (D4), ubicada en Urquiza y José Hernández, en la ciudad de Santa Fe.
Al respecto, el subsecretario de la APVAF, Lautaro Sappietro mencionó que “esta iniciativa nos permite tener un mayor control de las armas que tiene la Policía de Santa Fe, hoy llegamos a las 19.600 armas de fuego peritadas, esto nos permite tener una trazabilidad del armamento que circula en la institución policial”.
Asimismo, explicó Sappietro que “este procedimiento se enmarca en la decisión del gobernador Omar Perotti y el impulso del ministro de Seguridad Jorge Lagna de profesionalizar a la policía, que se suma a otras tareas que vienen desarrollándose por parte de esta Agencia”.
REGISTRACIÓN BALÍSTICA
El proceso de registración balística consiste en tomar las armas de uso policial que están depositadas en Logística, hacer un registro administrativo con el modelo, marca y número de serie del arma.
Mientras, en la parte física, con el arma registrada se efectúa un disparo en un cañón de recuperación balística. El proyectil que queda en este dispositivo se recoge y se guarda junto a su vaina en un sobre identificado con numeración. Cada arma tiene estrías en su cañón y el proyectil al recorrerlo imprime esas estrías que, al ser únicas, permiten luego identificar de qué arma se disparó.
El Ministerio de Seguridad continúa con el registro balístico de armas policiales
Toda la documentación y elementos se transfieren a la Agencia de Control Policial, lo cual se realiza para que todas las armas tengan una curva de seguimiento, en caso que un arma policial se use para llevar adelante un delito. Cada arma tiene un tenedor oficial y ante cualquier irregularidad judicial o patología médica, el arma tiene un ingreso para seguir haciendo sus registros.