Lula regresó al Planalto después del intento de golpe de Estado: qué dijo
El presidente de Brasil, Lula da Silva, volvió a trabajar este martes desde el Palacio de Planalto, en Brasilia, tras la intentona golpista del bolsonarismo que mantuvo en vilo el domingo pasado a Brasil y el resto de América latina.
En sus redes sociales el mandatario brasileño saludó a sus seguidores y confirmó ya se encontraba “trabajando en el Palacio de Planalto”, sede del Ejecutivo en el gigante latinoamericano.
En el mismo mensaje Lula aseguró que “la educación y la salud son áreas que fueron destruidas y abandonadas en los últimos años” y adelantó que hoy mantendrá “reuniones con los ministros de estas carteras, para trabajar y aplicar muy rápidamente medidas de reconstrucción en el país”.
El domingo por la noche Lula ya había visitado el Palacio de Planalto y la Corte Suprema en Brasilia para evaluar los destrozos una vez que los sediciosos ya habían sido desalojados por las fuerzas de seguridad.
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El interior del Congreso, el Supremo Tribunal Federal (STF) y el Palacio del Planalto fueron desocupados luego de una operación que contó con la tropa de choque y el lanzamiento de gases lacrimógenos desde helicópteros.
Antes y desde San Pablo, Lula había dado un discurso en el que calificó de “nazis” y “fascistas” a los golpistas bolsonaristas que invadieron las sedes de los tres poderes y decretó la intervención federal a las fuerzas de seguridad en Brasilia.
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Los ultraderechistas destrozaron las oficinas de la Corte Suprema, se sentaron en la silla del presidente del Senado mofándose de la situación y rompieron las oficinas contiguas a la de Lula, incluida la de la primera dama, además de obras de arte que forman parte del archivo histórico nacional.
Bom dia. Trabalhando no Palácio do Planalto. A educação e a saúde foram áreas destruídas e negligenciadas nos últimos anos. Hoje terei reuniões com ministros dessas pastas, para trabalharmos e muito rapidamente implementarmos medidas de reconstrução no país.
— Lula (@LulaOficial) January 10, 2023
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El interior del Congreso, el Supremo Tribunal Federal (STF) y el Palacio del Planalto fueron desocupados luego de una operación que contó con la tropa de choque y el lanzamiento de gases lacrimógenos desde helicópteros.
Antes y desde San Pablo, Lula había dado un discurso en el que calificó de “nazis” y “fascistas” a los golpistas bolsonaristas que invadieron las sedes de los tres poderes y decretó la intervención federal a las fuerzas de seguridad en Brasilia.
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Los ultraderechistas destrozaron las oficinas de la Corte Suprema, se sentaron en la silla del presidente del Senado mofándose de la situación y rompieron las oficinas contiguas a la de Lula, incluida la de la primera dama, además de obras de arte que forman parte del archivo histórico nacional.
El despacho de Lula, por tener una puerta reforzada, fue el único en no ser destruido.
Más de 80 ómnibus habían llegado el sábado a Brasilia para una manifestación que había llamado la atención del ministro de Justicia, Flavio Dino, quien había advertido de la situación al gobernador de Brasilia, Ibaneis Rocha, un bolsonarista que, según lo marca la Constitución, es el encargado de la seguridad en el Distrito Federal.