Recorrió más de 400 kilómetros para poder ser internado
Se trata de un vecino de Ceres, en el noroeste provincial, que tuvo que ser derivado a Rosario. En Santa Fe y Rafaela, la ocupación de camas críticas estaba casi al máximo.
Un paciente con coronavirus de la localidad de Ceres, en el norte de la provincia, tuvo que recorrer cerca de 430 kilómetros hasta Rosario debido a la falta de camas en esa región del territorio provincial.
El porcentaje de ocupación de camas en toda la provincia es muy alto. Según las estadísticas oficiales, ronda el 90 por ciento tanto en el ámbito de salud pública como privada. Y eso fue lo que complicó la atención de un vecino de Ceres, en el departamento San Cristóbal. Al no haber lugar disponible para su atención en esa localidad del noroeste, debió ser traslado a Rosario.
Así lo manifestó esta mañana el director de Tercer Nivel del Ministerio de Salud, Rodrigo Mediavilla. “Un paciente que se deriva es una vida que se salva, pero implicó una logística importante para concretar el traslado por 400 kilómetros. Estos son los rigores que impone la pandemia”, remarcó el funcionario.
Mediavilla agregó que la situación en cuanto al número de camas ocupadas es por demás de preocupante en toda la geografía de la provincia. En el caso concreto del paciente de Ceres, según afirmó, no hubo posibilidad de derivarlo a Rafaela, la ciudad más cercana a Ceres y con un sistema sanitario más complejo (el Hospital Jaime Ferré). “Este miércoles a la mañana, sólo quedaba una sola cama libre en terapia intensiva”, describió el funcionario del Ministerio de Salud.
Mediavilla dijo que se decidió el traslado del paciente a Rosario porque “se necesitaba mantener esa cama libre en terapia intensiva por si algún paciente del Hospital Ferré llegaba a desmejorar y se necesitaba atención en cuidados intensivos. Si tenemos un paciente estable de Ceres, por fuera del hospital Ferré, tratamos de conservar ese lugar para un enfermo inestable del propio nosocomio. Por eso se decidió llevar más lejos al que estaba estable. También teníamos más cerca Santa Fe, pero la capital provincial no está en mejores condiciones que Rafaela”, añadió.
Mediavilla reiteró que en este momento “hay muy pocas libres en los hospitales Cullen e Iturraspe. Si hay dos camas libres, las preservamos porque Santa Fe es grande. Al haber escasez, y si tenemos un paciente estable, nos arriesgamos al traslado para proteger al grave que no tiene cama. Estamos hablando siempre en terapia intensiva”.
“La logística de la regionalización de pacientes es muy compleja. Se han derivado pacientes a Firmat, Venado Tuerto, por ejemplo. La idea es buscar camas libres y darle oxígeno al sistema. Estamos preparados para esto. Tenemos los planes de contingencia y para aumentar plazas”, subrayó Mediavilla por LT10.