Violenta entradera en Rincón: “No lo maten a mi papá”, el desesperado ruego de un niño
Al menos cuatro ladrones redujeron a una familia, golpearon al dueño de la casa, y se llevaron dinero y una camioneta. Mercedes, víctima de este violento asalto, contó detalles de lo sucedido en su vivienda.
Una violenta entradera tuvo lugar la noche de este lunes en una vivienda de la zona de la costa, a la altura del kilómetro 10 de la ruta 1, en el límite entre San José del Rincón y Arroyo Leyes.
Mercedes, integrante de la familia asaltada, contó los dramáticos momentos vividos y el ruego desesperado de su hijo de 6 años, cuando veía que los ladrones golpeaban a su padre.
Marcedes relató que cerca de las 20 tocan la campana frente a la casa y cuando el marido sale a ver quién era, al menos cuatro sujetos los reducen, lo maniataron y entraron a la casa. “Estaban armados. Todos tenían barbijo. Había un joven que estaba muy sacado y le pegó a mi marido. Le pego un culatazo y voló mucha sangre para todos lados. Mi hijo empezó a los gritos. Además tengo una bebe de 5 meses que también empezó a llorar. Parecía que nos estaban destripando”, indicó la mujer
Agregó que los ladrones pedían plata y oro. “Les decíamos que no teníamos nada y que nos encierren en una pieza y se lleven lo que quieran. Después abrieron una caja fuerte de un oficina de mi marido y ahí encontraron 2 mil pesos. Eso pareció que los enojó más y le volvieron a pegar a mi marido”, expresó.
Mercedes señaló que los ladrones se llevaron una cadenita de oro, celulares y la camioneta Ford Ranger de la familia. “Habrán estado 10 minutos, pero para nosotros fue como una hora”, añadió.
La mujer contó que con el GPS del celular del marido pudieron rastrear dónde estaban los ladrones y dieron aviso a la policía, quienes sin embargo no pudieron dar con los delincuentes, que huyeron en otro vehículo y dejaron la camioneta de la familia abandonada.
Por último, Mercedes admitió que pasaron la noche sin dormir debido a los trámites que debieron realizar y por el trauma que le generó el asalto, y recordó que su hijo de 6 años le rogaba a los ladrones que “no lo maten a mi papá” mientras era brutalmente golpeado con la culata de un arma de fuego.