Dani La Chepi habló sobre su fallido desembarco en “Polémica en el Bar”
Hace unos días, Dani La Chepi subió a Instagram una imagen suya firmando un contrato con América para integrarse al staff de “Polémica en el Bar”. Pero horas más tarde la publicación desapareció, debido a que una cláusula de prioridad para contratarla de parte de Telefe, por su participación en “ MasterChef Celebrity 2”, puso en jaque esta nueva propuesta televisiva.
Este hecho disparó varias consecuencias que tienen que ver con su popularidad en su mejor y su peor versión, su personalidad y su necesidad de cambiar algunos aspectos de su vida. La artista acaba de editar la canción “No va más”, con la que se proyecta en la música -canta hace muchos años, para algún desprevenido que recién la haya conocido-, y en charla con DiarioShow.com habla sobre su actualidad, en la que quiere cosechar todas las cosas buenas que le están pasando, al mismo tiempo que lucha por abandonar aspectos de su pasado que la atan y podrían evitar que siga creciendo como ella desea.
“Estuvieron diciendo giladas, vi que pusieron que me habían obligado a bajar el posteo. Na- die de Telefé me obligó a nada y nadie de América tampoco, de hecho no lo bajé, lo archivé, que es una opción de Instagram, pero lo explico por mi público, que me preguntaban todo el tiempo cuándo empezaba”, comienza haciendo un mea culpa.
Aunque en un principio se estresó por sentir que había hecho algo mal, luego se lo tomó de mejor manera: “Es trabajo, pero no sabía nada de lo legal, por inexperta. No es nada grave. El otro día me estresé y creí que iban a denunciarme, que estaba todo remal. Ahora pienso qué bueno es que un canal diga ‘nosotros tenemos la prioridad’. Quise mirar la parte positiva antes que la negativa”.
“Soy muy intensa y ansiosa, necesito solucionar todo urgente, entonces me pegó mal. Pero después me dije ‘no hay ningún conflicto, son cosas que pasan”
Criada en base a trabajo duro, hija de verdulero, madre soltera que tuvo que hacer todo y de todo para darle un bienestar a su pequeña Isa y sobrevivir en un mundo como el del espectáculo, para Dani no es fácil relajarse, porque nadie le enseñó a tomarse un respiro. “Soy muy intensa y ansiosa, necesito solucionar todo urgente, entonces me pegó mal. Pero después me dije ‘no hay ningún conflicto, son cosas que pasan, ahora aprenderás para la próxima vez que te llamen’. Está buenísimo, en realidad, lo que está pasando”, explica, con una voz apresurada, como si cada segundo contara y hubiera una cuenta regresiva esperando a llegar a cero al final de la hora, el día y la semana.
Sin descanso
Antes de empezar “ MasterChef Celebrity 2”, donde llegó mucho más lejos de lo que ella esperaba, se definía como “remadora”. Pero post-reality cambió su perspectiva.
“No me quedo en la frase de ‘siempre remando’, ‘cómo cuesta todo’; al contrario, ahora cambié el ‘siempre remando’. Ahora digo ‘siempre soñando’ y no parar. Yo creo que hay muchas cosas para todos, porque ninguna persona es una sola cosa, todos somos muchas cosas, entonces hay que seguir dándole para adelante y buscar tu lugar. A veces te toca un lugar que no querés, pero hay que sentarse en alguna silla y bancársela un rato hasta que salga lo que a vos te gusta”, reflexiona.
Antes del concurso de cocina, La Chepi estaba en 2,5 millones de seguidores en Instagram y ahora subió a 3,2 millones.
-¿Cómo te modifica saber que hay más gente prestando atención?
-El público se renovó bastante con esto de ‘MasterChef’, y hoy las redes son tu carta de presentación. Te buscan y encuentran que hago otras cosas, ven que yo canto y la gente flashea. Muchos piensan que uno es solamente el videíto vendiendo la promo del yogurt, cuando uno lo hace para morfar a eso, lo que uno sabe hacer es otra cosa.
La artista insiste en que eso de “celebrity” es un poco un chiste, porque ella, si bien es reconocida en los medios, indica que es por ser popular. Pero ello no quita los prejuicios y, al analizar el fenómeno, declara: “Cuando te hacés más popular, tenés la parte recontrapositiva, que es mostrar lo que hacés desde los 16 años, que la gente sepa que hay una preparación, un estudio. Y que vea que todo es un esfuerzo, no es que fue todo de casualidad”.
Su hija, Isa, es su gran contención y su más grande ocupación.Su hija, Isa, es su gran contención y su más grande ocupación.
“Y ahora tengo más llegada a más gente, a más generaciones, porque soy muy popular en las redes sociales, pero fuera de eso, yo voy por la calle y no soy Di María. También sucede que cada vez tenés que cuidarte más en lo que decís y cómo lo decís. Antes era como más un juego, yo le hablaba a un par de madres que me seguían y de golpe tengo público de hombres. También me hace notas Ale Fantino, por ejemplo, que no sabía ni quién era yo, de golpe estás sentado ahí y agarrás otro público. Me lo tomo muy en serio y me parece que el teléfono y las redes sociales hoy son un arma de doble filo”, analiza con sorpresa.
Luego, indica que pasó de lo lúdico a la seriedad con su crecimiento por el acercamiento real que tuvo con muchos seguidores: “Siempre que salía de casa, en el barrio, charlaba con los mismos, ahora de golpe se suma el del Uber, que ahora te dice que su mujer estaba indignada cuando me eliminaron del reality. Me consumieron desde otro lugar, y siento que es muy copado pero es una gran responsabilidad. Es muy loco que alguien se sienta identificado y que te elija con tanto amor”.
-¿Cuál sería la responsabilidad?
-No querer defraudar a nadie. Igual yo también me pongo muchas presiones y me autoexijo de- masiado. Pienso mucho qué voy a publicar, porque quiero divertir bien, no quiero divertir desde un lugar que no sea sano.
-Imponerse presiones y no defraudar tampoco parece muy sano…
-No, para nada. Soy una convencida de que la perfección no existe en ningún ámbito de la vida. Pero quiero dar algo más, para que no sea siempre lo mismo. Todo el tiempo me duele la cabeza pensando en algo para sorprender. Cómo puedo hacerlo y qué más puedo hacer. Que yo puedo más. Y a veces esa autoexigencia que me pasa en la vida, no solo en las redes, me pasa como mamá, como pareja, como amiga, como hija. diciendo que era una maleducada! Utilizan el término ‘camionera’ como si eso fuese un insulto y no un trabajo digno. ‘Camionero’ no es un insulto, pero sí ‘camionera’. Nos empezaron a bardear diciendo que éramos grasas y otras cosas.
-¿Cómo repercute en vos?
-Me pone triste que la mujer tenga que salir a dar explicaciones o soportar mensajes de la gente agrediéndote de alguna manera por tu forma de ser, porque yo soy así. Estoy harta de dar explicaciones. La gente cuestiona cómo festejás, si decís una mala palabra, si no la decís. Con el chiste de que me gustaba el tano (Donato de Santis, jurado del reality), que estaba charlado eso, tenía que leer co- mentarios de gente tratándome de pu…, de grasa, me habían llegado a decir ‘con razón sale con un basurero’.
-Cuando Alex, hijo de multimillonarios, decía ‘el más pij…’, ‘esto es de pobre’, y los otros insultos, que le tiró onda en broma a Soledad Pastorutti, que también está casada, nadie dijo que era desubicado. Él, como es hombre, puede decir cualquier cosa, bardear, levantarse una mina casada o halagarla. En cambio, yo tengo que dar explicaciones de cómo festejo, defenderme de una agresión, todo el tiempo pedir que no me digan nada si me saco fotos en bombacha y corpiño. Al hombre le aplauden muchas cosas, y si las hago yo me dicen que dé el ejemplo como mamá”.
-¿Cómo se combate eso?
-Como siempre lo hice, sin dejar de hacer. Lo mismo que decía sobre mantener tu sueño, sirve para esto, yo no quiero quedarme con la sensación de no saber qué hu- biese pasado si no hacía tal cosa. Eso lo aprendí cuando mi papá se enfermó, porque decidió ir a hacerse un estudio para disfrutar de su nieta, cuando se había enterado que yo estaba embarazada. Le tocaron una vena, pum, ACV isquémico, la cagaron. Y él se quedó con muchas cosas. Yo lo sé. Por algo todavía no se va. Hace ocho años que está así, en enero van a ser nueve. Pienso qué le pasará dentro de su cabeza, ¿podrá razonar y pensar en todo lo que no hizo por miedo? Al qué dirán, a perder.
-Suenan las mismas palabras con la que te describías vos sobre la autoexigencia.
-Sí, seguramente. Aprendí, por eso, que no hay un momento ideal para nada, nunca es el mo- mento ideal para nada. Hay que mandarse ahora. Y si nunca es el momento ideal, siempre lo es. Hace poco me fui un fin de semana con mi novio y mi hija a Mar del Plata, no subí un solo chivo. Este fin de semana quería ocuparme de que mi hija meta las manos en la arena. Y la cara de felicidad de mi hija… me emociono cuan- do lo digo. Pero la cara de mi hija corriendo diciéndome “¡qué bueno está esto!”.
Para cerrar, reflexiona sobre la vida que desea tener: “Son cosas simples, no es irme a Miami dos meses. No me puedo tomar esos dos días de bajar y cambiar de aire. Admiro a la gente que sabe darse un gusto. Esa gente que razona y dice ‘hoy pedimos helado’. Ese espíritu que te da años de vida, años de disfru- te y eso se contagia, se contagia a tus hijos, a tus nietos; yo quiero hacer eso”.
Sobre su frustrada llegada a “Polémica”: “Quería estar en una mesa de machistas”
Desde que trascendió que iba a sentarse en la mesa de ” Polémica”, muchos seguidores comenzaron a preguntarle por qué lo hacía, ya que el ciclo no tiene mucho que ver con lo que ha hecho y hace en los diferentes aspectos de su carrera.
-¿Por qué aceptaste?
-Muchos me decían que no quieren verme ahí sentada en un grupo de hombres, re machista. Y más allá de eso, yo quería sentarme ahí para decirles ‘¿cómo? ¿qué dijo usted? ¿En qué año nació?’ Llevar otra visión de las cosas. La madre soltera que mantiene a su hija no se va a bancar que venga un tipo y le diga cualquier cosa. Es lo que me llamaba la atención. Además, tiene que ver con ganar horas de vuelo en la televisión, es todo el tiempo seguir caminando y ahora que entré en el medio, quiero seguir creciendo.
.
.
Dedicada a su carrera musical: “En todas las canciones soy yo”
Hace una semana salió “No va más”, tema en colaboración con Rocío Quiroz, compuesto por Dani junto con Federico Plaate. Sobre el lanzamiento, que incluye videoclip grabado a bordo de un micro, destaca: “El otro día una chica me dijo que escribí algo más feminista, pero escribo como una mujer porque es lo que soy. El primer tema que saqué fue ‘Qué vas a hacer’, tenía que ver con la mujer empoderada, de decirles a las minas que sigan avanzando y no quedarse en el pasado. Mi historia con Javier empezó así. Yo abrí una ventana, cuando en medio de la pandemia se aplaudió a los recolectores y mi hija quería aplaudirlos. De golpe, por la ventanita del amor me encontré con un flaco que amo”.
Y detalla sobre el vínculo entre su historia personal y el tema: “Podría haberme quedado en plena pandemia, con un vaso de vino y mandarle mensajes a mis ex. Pero, bueno, sentí que me tenía que animar. Tantos golpes que me di, una mancha más al tigre, ¿qué le va a hacer? O sea, es un llamado a ir para adelante, el ‘no más’, es decir que el pasado, pisado, no vuelvas para atrás”.
Sobre su proyecto artístico exclama que “en todas las canciones soy yo, en ninguna canción que escribimos con Fede, que es mi productor musical, yo le digo, ‘quiero decir esto’. Son cosas que yo quiero decirme a mí y que después se lo digo a la gente. No busco rimas, quiero contar una historia que le llegue a la gente”.